España no cumple con la Agenda 2030: hay 2 millones de pobres más de los que debería

Madrid

España debería tener 2,1 millones de ciudadanos menos en situación de pobreza y exclusión social para cumplir con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) que asumió al tomar parte en la Agenda 2023, según revela un informe elaborado por la Red Europea de Lucha contra la Pobreza y la Exclusión Social en el Estado Español (EAPN-ES).

En España tendría que haber como máximo 10,2 millones de personas en esta situación para cumplir con los fines de la Agenda 2030, pero, en realidad, hay más de 12 millones de ciudadanos que viven sumidos en la pobreza y la exclusión. Esto significa que el 26% de la población española es pobre y, además, vive forzosamente por sus circunstancias económicas al margen de la sociedad.

Sin embargo, hay datos que se pueden considerar positivos. En 2022 se redujo tanto la pobreza como la exclusión social en todas las comunidades autónomas españolas con respecto al año anterior. En tan solo un año se redujo el número de pobres en 800.000 personas. Una mejora "insuficiente", según la EAPN-ES, ya que nuestro país está "lejos" de ejecutar los ODS que sobre el papel debería cumplir dentro de siete años, en 2030, y que imponen que en esa fecha tiene que haber como máximo unos 6,6 millones de personas en riesgo de pobreza o exclusión.

Una de las metas de la Agenda 2030 es que para ese año se haya reducido al menos a la mitad la proporción de hombres, mujeres y niños de todas las edades que viven en la pobreza en todas sus dimensiones.

La desigualdad que corta la Península: más pobres en el sur, menos el norte

El informe constata, además, que se sigue habiendo una enorme brecha de desigualdad entre las regiones del norte y las del sur de la geografía española. Los datos reflejan que la desigualdad divide a España en "dos mitades" y, aunque constata que se viene produciendo "un proceso de reducción" de la desigualdad territorial desde 2016, el cambio en la tendencia es todavía muy insuficiente pues las tasas de pobreza regionales más elevadas multiplican por 2,5 y por 3, respectivamente, a las más bajas.

Del estudio se extrae que, en 2022, en las regiones del sur, es decir, Extremadura, Castilla-La Mancha, Comunidad Valenciana, Murcia, Andalucía, Canarias, Ceuta y Melilla, la tasa media de ciudadanos que viven en la pobreza y la exclusión social era del 33,1% de la población residente, cerca de 5,5 millones de personas. Esta cifra cae casi al 20,5% para aquellas que viven en la mitad norte del país, unas 6,8 millones de personas.

Respecto a los ciudadanos que sufren una pobreza severa, delimitado como las personas que viven en hogares con ingresos inferiores a 6.725 euros por unidad de consumo al año (unos 560 euros al mes), en 2022 había en España un total de 4,2 millones de personas en esta situación, es decir, el 8,9% de la población.

A nivel regional, la tasa de pobreza severa se recortó en el último año en la gran mayoría de Comunidades, excepto en Navarra, País Vasco y Castilla y León. A pesar de la mejora, en algunas regiones la tasa de pobreza severa afecta a más de una décima parte de su población. Es el caso de Andalucía (14,4%), Canarias (13,2%), Murcia (11,6%) y Extremadura (10,2%), todas ellas ubicadas en la mitad sur de la Península.

En cuanto al indicador de la privación material y social severa, el estudio muestra que un mayor número de ciudadanos de cinco comunidades han visto deteriorada su situación. Navarra, Castilla-La Mancha, Extremadura, Galicia y Andalucía.

Europa Press