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El cofundador de la empresa del submarino advirtió de una "implosión instantánea" horas antes de la confirmación oficial

El hombre que cofundó la empresa OceanGate con el piloto Stockton Rush, quien iba en el sumergible desaparecido, declaró a la BBC horas antes de la rueda de prensa oficial que pudo producirse una "implosión instantánea" en la nave

Fotografía facilitada por Ocean Gate que muestra el exterior de un submarino turístico, con capacidad para cinco personas, operado por la citada compañía / Ocean Gate (EFE)

Madrid

El hombre que cofundó la empresa OceanGate con el piloto Stockton Rush, quien iba en el sumergible desaparecido, declaró dos horas antes de la confirmación oficial en una entrevista a la BBC que pudo producirse una "implosión instantánea" en la nave. Una hipótesis que ya ha sido confirmada por la Guardia Costera de Estados Unidos, en una rueda de prensa, donde el almirante John Walker afirmó: "Esta mañana un ROV ha descubierto una pieza del submarino. EL ROV encontró otros restos y al consultar a expertos determinamos que los restos son consistentes con una pérdida catastrófica de la presión en la cámara. Hemos notificado a las familias".

Minutos antes de la rueda de prensa, OceanGate publicó un comunicado en la misma línea, confirmando que vida de los cinco hombres se había perdido, aunque sin mencionar las causas del accidente.

Guillermo Söhnlein, quien dejó la empresa hace 10 años, ha sido entrevistado este jueves en la televisión pública británica al conocerse la noticia de la aparición de "escombros" en el Atlántico. Uno de los robots submarinos que participaban en las labores de búsqueda ha descubierto esta tarde "escombros" dentro del área de búsqueda cerca del Titanic, tal y como ha anunciado la Guardia Costera de EEUU.

Tras hacerse pública la noticia, Söhnlein explicó a la BBC que el protocolo de la empresa "es que el piloto saque el submarino a la superficie". "Siempre he pensado que eso es lo que Stockton habría hecho".

"En este caso resultaría muy difícil encontrar el submarino porque el barco de superficie no habría sabido dónde mirar", continuaba afirmando el cofundador de la empresa, quien explicaba que su miedo es que estuvieran en la superficie y nadie les pudiera encontrar. Sin embargo, también ha valorado la posibilidad de que haya ocurrido una catástrofe, como finalmente se ha confirmado.

"Lo que sí sé es que, independientemente del submarino, cuando se opera a gran profundidad, la presión es tan grande que si hubiera un fallo se produciría una implosión instantánea. Si eso es lo que ocurrió, habría ocurrido hace cuatro días", ha afirmado, en la misma línea de la hipótesis de la Guardia Costera. "En todo caso, creo que tenemos que volver atrás y aprender de lo ocurrido, averiguar qué ha pasado, tomar esas lecciones y llevarlas adelante", ha zanjado.