"Lo más duro lo encontramos en un puticlub de El Bierzo. No podemos hablar de habitaciones, nos encontramos celdas"

Los burdeles y sus llamativos rótulos de neón han formado parte del paisaje cotidiano español durante varias décadas. Según un estudio elaborado en 2008 por DatosRTVE, aproximadamente un tercio de los hombres españoles han pagado por mantener relaciones sexuales. Frente al 21,9% que reconoció haberlo hecho con más frecuencia, el 10,2% expuso haber pagado solo una vez en la vida.

Desde 2021, dos arqueólogos han visitado diferentes burdeles abandonados en las carreteras de Galicia y León. Su objetivo es radiografiar la España que trató a las mujeres como objetos sexuales. Xurxo Ayán, arqueólogo e investigador de la Universidad Nova de Lisboa, ha visitado 'La Ventana' para explicar todos los detalles que se han ido encontrando durante su investigación.

“Hemos querido tratar un tema tabú, un negocio ilegal basado en la esclavitud sexual"

"La gente piensa que la arqueología habla del pasado, pero no es así. También habla del presente y del futuro", ha explicado el arqueólogo. La finalidad de este trabajo es clara: "Hemos querido tratar un tema tabú, un negocio ilegal basado en la esclavitud sexual. Esta práctica mueve gran parte de la economía del país y que se desarrolla con total impunidad".

Cuando nos imaginamos un arqueólogo nos viene a la mente la imagen de excavador que busca ruinas y huesos. "Nosotros elaboramos una historia de España desde los años 70 hasta la actualidad. Nos fijamos en cómo ha ido evolucionando la esclavitud sexual. Entramos a los puticlubs con nuestras estaciones topográficas, elaboramos planimetrías... Demostramos claramente cómo son auténticas cárceles", ha explicado Ayán.

Son muchos los objetos que se han encontrado durante sus investigaciones. "El catálogo es amplio. Lo más duro lo encontramos en un puticlub de El Bierzo. No podemos hablar de habitaciones, nos encontramos celdas con ventanas de treinta por treinta centímetros. No había camas, eran pivotes de hormigón con una tabla y un colchón encima. Los restos que quedan siempre están vinculados al putero, como por ejemplo el rodillo con papel higiénico para solventar sus necesidades fisiológicas", ha comentado Ayán.

"Hemos llegado a encontrar medicamentos con los que se les drogaban"

Unos lugares donde las mujeres estaban deshumanizadas. "Hemos llegado a encontrar medicamentos con los que se las drogaban sistemáticamente y alcoholizadas para que rindiesen más en el trabajo", ha destacado el arqueólogo.

Según informa Ayán, España es el segundo país con mayor porcentaje de puteros, por detrás de Tailandia y Puerto Rico. Además, agrega que, según los datos, en el país hay más de 1.800 burdeles, pero él piensa que probablemente sean más del doble o del triple. Sitios donde comúnmente se celebran despedidas de solteros y otras celebraciones. "A día de hoy es una ruina que nos interpela como sociedad y a la que nadie le ha prestado atención", ha concluido el arqueólogo.