"Tiene una amiga entrañable, que es como se decía con su abuelo Juan Carlos": por qué Froilán viene tanto a España

Julio Iglesias cumple 80 años en septiembre y Martín Bianchi anda en Tokio pensando tanto en él que podríamos decir que se olvidó de vivir. Se pregunta si cantará en la inauguración del nuevo Bernabéu, como quiere Florentino Pérez y si su estado de salud será tan bueno como dice su hijo Julio José, que se comunica con él de forma telepática, según cuenta.

No sólo Julio Iglesias le preocupa. También la boda de Tamara, para la que Ángels le tenía preparada una "checklist", para que, cual wedding planners, puedan ver qué flecos faltan por atar. ¿Presencia de Carolina Molas, consuegra de Preysler? Check. Participará en la exclusiva, aunque no cobrando -aunque tal vez podría "hacerse un Pantoja" y cobrar un porcentaje de lo que cobrará su hijo por posar para la revista de cabecera de su familia política.

¿Presencia de Enrique Iglesias? No check. Aún se recupera de una grave neumonía y no viajará a España. ¿Presencia de Carmen Martínez Bordiú, otrora íntima de Isabel? No check. Se va de viaje con sus nietos y ha excusado su presencia en el enlace. La amistad entre las dos damas de la alta sociedad se resquebrajó en 1997, cuando Chabeli acudió al programa 'Tómbola', que se estrenaba, y abandonaba airada el plató exclamando "Tu programa me da vergüenza, esta gente son gentuza" y haciendo historia de la televisión.

Martín, además, celebra la "obreguización" de Paloma Cuevas, que toma el relevo de los posados en bikini de Ana Obregón y se la ve muy liberada tras su matrimonio con Enrique Ponce y su reinvención con Luis Miguel. Pero no descarta que Ana Obregón también pose en bikini y le ponga uno de los suyos a la "niethija".

Y comenta que, como anticipaba la semana pasada, Froilán ha vuelto a tomarse unos días libres y ha estado en Madrid, donde ha salido con sus amigos. Entre ellos, una amiga entrañable, Belén Perea, que no se separa de él. Quizá esa sea una de las razones por las que viene a España.