Mads Mikkelsen, tu villano favorito: "Es bastante surrealista formar parte de Indiana Jones"

El actor danés interpreta a un científico nazi en 'Indiana Jones y el Dial del Destino', la película con la que Harrison Ford se despide de una de las sagas más icónicas de la historia del cine

Mads Mikkelsen, en la premiere en Londres de Indiana Jones (Photo by Jeff Spicer/Getty Images for Disney) / Jeff Spicer

Cadena SER28/06/2023 - 06:09 UTC

Madrid

Mads Mikkelsen se ha convertido en unos de los villanos favoritos de Hollywood. El actor danés, conocido por títulos europeos como La caza o la más reciente Otra ronda, puede presumir de haber participado en casi todas las grandes franquicias. Fue el banquero de los terroristas en Casino Royale, una de las mejores cintas de James Bond, ha sido el malvado hechicero de Marvel en Doctor Strange, ha trabajado en el universo Star Wars en Rogue One y le tocó sustituir a Johnny Depp en la saga de Animales Fantásticos. Ahora completa ese currículum con un premio mayor, el de interpretar al último villano de Indiana Jones en la despedida de Harrison Ford. "A menudo interpreto al malo de las películas americanas. Y a menudo interpreto a personas normales o personas con misiones diferentes cuando hago películas danesas o europeas ¿Por qué es eso? No estoy seguro. Quizá porque tengo un acento raro allí y ellos lo ven así. No me importa. Creo que he tenido mucha suerte de poder interpretar estas variantes de diferentes villanos", explica entre risas el actor en conversación con la Cadena SER.

Durante la promoción de la película que cierra la saga de aventuras ideada en 1981 por George Lucas y Steven Spielberg, Mikkelsen también ha confesado sus mentiras piadosas en todos estos años. En cada entrevista o audición decía ser fan de esa saga, ya fuera James Bond o Star Wars, pero realmente su infancia, o al menos eso cuenta ahora, siempre estuvo marcado por la revelación de ese intrépido arqueólogo con miedo a las serpientes. "No te puedo decir cuánto, su impacto fue enorme para mi generación. Cuando era un niño que no soñaba con formar parte del mundo de la actuación ni nada parecido, lo veía como cualquier otra persona y quería ser Indiana Jones. No había visto nada igual antes. Fue simplemente increíble. Y luego tengo colegas, en concreto amigos directores que querían ser directores por esa película. Así que tuvo un gran impacto en nosotros. Ser parte de esto ahora es un gran honor y también bastante surrealista", confiesa de una producción que ahora dirige James Mangold, autor de, entre otras, las películas de Lobezno y Le Mans'66.

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En Indiana Jones y el dial del destino Harrison Ford regresa en plena forma. El profesor Jones está a punto de jubilarse, de acabar con toda una carrera dedicada a la docencia y a la búsqueda de tesoros, pero su ahijada lo embarca en una nueva aventura. La británica Phoebe Waller Bridge, la creadora y protagonista de la serie Fleabag, es el contrapunto perfecto con su carisma y humor en una película en la que, por supuesto, regresan los nazis. Ahí entra en acción el villano de Mads Mikkelsen, un científico que persigue una reliquia que cambie el curso de la historia. "Fue raro porque no conocí a Harrison Ford, conocí a Indiana Jones. Él salía del tráiler con el sombrero, el látigo, la chaqueta. Suponía que me encontraría con Harrison y hablaríamos sobre alguna escena, pero tuvo también una prueba de vestuario, así que nunca conocí a Harrison en el set. Realmente lo conocí cuando terminamos", dice el actor de su primer encuentro cara a cara con Harrison Ford en una cinta que combina emoción, acción y nostalgia de la buena.

"La nostalgia es bonita. La nostalgia nos trae recuerdos, nos hace sentir acogidos y el corazón nos lleva a mejores momentos de nuestras miserables vidas. Obviamente, si solo vives en la nostalgia, eso es diferente. Pero está bien visitarla", defiende un Mikkelsen que, sin embargo, encarna la nostalgia mala, aquella que se afana en volver a tiempos oscuros. La película aporta una bonita reflexión sobre el paso del tiempo pero también añade una advertencia sobre el peligro de volver al pasado, de viajar en el tiempo según el código secreto de Arquímedes, como le pasa a los protagonistas en el prólogo inicial que nos lleva a los inicios de la guerra y el nazismo. Un paralelismo que se puede aplicar al contexto actual, con el auge en toda Europa de nacionalistas, extremistas y románticos de tiempos totalitarios. "Oh, me preocupa todo, que la extrema derecha o la extrema izquierda quieran izar su bandera. No creo que sea un momento de la historia que queramos repetir en otra ocasión. Espero que hayamos aprendido de la historia. A menudo no lo hacemos. Así que crucemos los dedos", se limita a responder el danés preguntado por el avance de la ultraderecha en el viejo continente.

Las escenas de acción finales elevan el nivel de una película que anda todo el rato en esa línea entre lo viejo y lo nuevo. La cinta puede leerse también como una manera de entender el cine, como algo comercial, al que sacar dinero, lo que sin duda es para muchos ejecutivos el regreso de Indiana Jones, o como algo que preservar para la historia del cine. Como el dilema al que se enfrenta el personaje de Waller-Bridge de hacerse rica vendiendo las reliquias arqueológicas o preservarlas para que el curso de la historia no cambie. La historia del cine ha demostrado precisamente que no hay mejores, y más fáciles, villanos que los nazis, el personaje de Mikkelsen está parcialmente inspirado en un ingeniero alemán que fue nacionalizado e integrado en la NASA. Al actor, sin embargo, no le asustan los malos. Y más después de interpretar al Hannibal Lecter más sofisticado durante tres temporadas. "Tengo que ser honesto, probablemente hay bastantes más matices en el personaje de Hannibal con los que podía jugar. Quizás también los tenga este personaje si hiciese diez películas más, pero ahora mismo es solo un científico y fue divertido interpretarlo. Es un hombre apasionado, pero desgraciadamente llevaba puesto cierto uniforme", concluye el actor a punto de completar el tour promocional -Berlín, Taormina, Londres...- y deseando regresar a su casa de Mallorca. "Siempre estoy allí. En cuanto tenga oportunidad, me iré. Es mi isla favorita".

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José M. Romero

Cubre la información de cine y series para El Cine en la SER y coordina la parte digital y las redes...