Un general del ejército ucraniano asegura que ya han recibido bombas de racimo procedentes de EEUU
El país de Joe Biden anunció la semana pasada que enviaría este tipo de munición en su próximo paquete de ayudas
Madrid
Un general del ejército ucraniano ha confirmado a la CNN este jueves que Ucrania ya ha empezado a recibir bombas de racimo por parte de Estados Unidos. Según este alto cargo militar, esta munición "puede cambiar radicalmente el campo de batalla" porque sobre el terreno "tendrán ventaja sobre Rusia" y esto, a su juicio, provocará que el presidente ruso, Vladímir Putin, se vea obligado a ceder "la parte del terreno donde es posible usarlas".
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Sobre el uso de estas armas, la OTAN se ha pronunciado recientemente. El secretario general de la organización, Jens Stoltenberg, ha dejado en manos de los aliados la decisión de suministrar munición de racimo a Ucrania, tras recordar que en el seno de la OTAN no hay una posición común sobre la Convención sobre las Municiones de Racimo de 2008 que prohíbe el uso, desarrollo, producción, adquisición, almacenamiento y transferencia de esta clase de armamento. En este sentido, el pasado viernes, Estados Unidos confirmó que enviará bombas de racimo a Ucrania pese a las críticas recibidas.
Son varios los países miembros de la alianza que no están de acuerdo con el uso de estas bombas, pero EEUU no forma parte de ellos. "Una serie de aliados han firmado la convención y otros no. Es una decisión individual decidir sobre la entrega de esta asistencia militar a Ucrania. Es cosa de los gobiernos y no de la alianza", afirmó el jefe político de la OTAN el pasado viernes en rueda de prensa previa a la cumbre de Vilna, Lituania, que se ha celebrado esta semana y que ha reunido a los líderes aliados.
Entre los países que han firmado no usarlas están más de un centenar, entre ellos miembros de la OTAN como Alemania, Francia, Reino Unido, Italia o España, pero no Estados Unidos. Su decisión de enviarlas ha generado polémica y ya son varias las voces que se han posicionado en contra, como organizaciones como Human Rights Watch (HRW) y países como Alemania que se oponen a ello al estar prohibidas por la ley internacional. Ucrania ha alegado que las utilizará contra las tropas rusas atrincheradas antes del avance de sus fuerzas.
Tras conocerse la noticia, Rusia también se pronunció para afirmar que, en el caso de que se acaben usando, Moscú "utilizará medios de destrucción similares", dijo el pasado martes el ministro de Defensa de Rusia, Serguéi Shoigú. "Si Estados Unidos suministra bombas de racimo a Ucrania, las Fuerzas Armadas rusas se verán obligadas a utilizar armas similares contra las fuerzas ucranianas", sfirmó Shoigú en declaraciones transmitidas por la televisión rusa.