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"Mi trabajo ha sido una carga pesada para mi esposo y mis hijos": la vice primera ministra holandesa deja la política tras recibir amenazas continuas

Sigrid Kaag pertenece al partido de tendencia izquierdista D66 y recibe a diario amenazas e insultos por parte de la ultraderecha sobre el color de piel de sus hijas y por su condición de mujer

Sigrid Kaag anunciando que no liderará el partido D66 de cara a las próximas elecciones / REMKO DE WAAL (EFE)

Ámsterdam

La ministra de Finanzas holandesa, Sigrid Kaag, dejará la política después de las próximas elecciones para aliviar a su familia de la carga de amenazas que le han hecho, dijo en una entrevista con un periódico publicada el jueves. "Mi trabajo ha sido una carga pesada para mi esposo y mis hijos", dijo Kaag al diario holandés Trouw.

"No voy a renunciar porque mi seguridad sea un problema para mí. Pero es para ellos. Me gustaría que las cosas se calmaran.” Recientemente, en un programa de televisión holandés, las dos hijas de Kaag hablaron sobre su preocupación por su madre debido a las amenazas que le habían hecho, lo que provocó una emoción visible en la ministra cuando se enfrentó a la grabación.

En mayo, Kaag, de 61 años, dijo que el entorno para los políticos en los Países Bajos se había vuelto "tóxico", ya que ella y muchos de sus colegas recibían amenazas continuas y, a menudo, necesitaban medidas de seguridad estrictas.

La decisión de Kaag de irse se produce tres días después de que el primer ministro Mark Rutte anunciara inesperadamente que dejaría la política una vez que se forme un nuevo gobierno. Rutte presentó el viernes la dimisión de su cuarto gobierno de coalición tras no poder llegar a un acuerdo sobre políticas de inmigración más estrictas.

El ministro de Relaciones Exteriores, Wopke Hoekstra, también dijo esta semana que no se presentaría a las próximas elecciones, que se espera se celebren a mediados de noviembre.

La súplica de sus hijas

El pasado mes de mayo, Kaag lloró en un programa de televisión tras escuchar a sus dos hijas decir que estaban preocupadas por que pudiera sufrir un atentado. Temían que la dirigente política acabara "como Els Borst", una ministra de Sanidad asesinada en 2014 por un hombre con problemas psíquicos.

Kaag pertenece al partido de tendencia izquierdista D66 y recibe a diario amenazas e insultos racistas y misóginos por parte de la ultraderecha. Diplomática veterana de la ONU, Kaag ingresó a la política holandesa en 2017 cuando se convirtió en ministra de Relaciones Exteriores en el tercer gabinete de Rutte. Antes ha trabajado en países como Líbano, Sudán y Siria y ha pasado muchos años fuera de su país por lo que sus hijas se han criado también lejos de Países Bajos. En una entrevista a El País el pasado junio en Madrid, Kaag habló sobre las amenazas que recibe: “Vivimos un clima político muy polarizado, secuestrado por grupos extremistas de derecha radical. Es una amenaza a la democracia que debemos tomarnos muy en serio”.