"Se puede vivir sin decir grandes mentiras, pero no sin recurrir a las mentiras sociales"

Según la Real Academia Española (RAE), el concepto 'mentira' se refiere a la expresión o manifiesto contraria a lo que se sabe, se piensa o se siente. Hay muchas razones por las que mentimos, entre ellas para quedar bien, justificarnos, evitar conflictos, obtener lo que queremos, evitar tener que tomar decisiones o retrasarlas, protegernos a nosotros mismos, proteger a los demás o para evitarles el dolor.

José María Martínez Selva, catedrático de psicobiología de la Universidad de Murcia y autor del libro 'La psicología de la mentira', ha visitado 'La Ventana' para explicar por qué metimos los seres humanos.

"Hay un tipo especial de mentiroso, el gran fabulador"

Según el catedrático, existe una tendencia a aceptar lo que nos dicen y a creerlo. "Creer lo que nos dicen es una de las bases de la vida en sociedad. El mentiroso se aprovecha de esta situación, cuenta con la predisposición de que se van a creer lo que va a decir. Lo que es muy difícil es saber si una persona está mintiendo o no".

Se suele asociar las mentiras a dos tipos de personas: las inteligentes y las sinvergüenzas. "Hay un tipo especial de mentiroso, el gran fabulador. Es aquel que consigue engañar a mucha gente o engañar durante mucho tiempo. Solo lo puede hacer aquella persona que tenga muchas habilidades sociales e inteligencia. Se aprovecha de los demás", ha comentado Martínez.

En muchas ocasiones la gente detecta a las personas que repiten sistemáticamente la falta de verdad en lo que dicen, lo que acaban generando desconfianza hacia el mentiroso. "Hay una especia de castigo social de las personas que les rodean. En este sentido, la sociedad pone límites o puede mirar a otro lado", ha indicado.

"Puede ser un arte si se practica"

José María Martínez Selva ha explicado que en la sociedad existe la tendencia a realizar mentiras piadosas o aquellas que se llevan a cabo para quedar bien. "Lo que sí que puede ocurrir es que una persona sea capaz de vivir mucho tiempo sin decir grandes mentiras. Se puede vivir sin decir grandes mentiras, pero no sin recurrir a las mentiras sociales".

Una mentira se puede decir de varias maneras. "Puede ser un arte si se practica. Hay una doctrina moral y religiosa que trata del mentir no decir toda la verdad, sino diciendo una parte. De esta forma se da a entender una cosa que en realidad no es. También existe una doctrina teológica sobre lo que es y no es la mentira, se basa en la actitud moralista y utilitarista", ha explicado Martínez.

Existen indicios que te pueden indicar si una persona está mintiendo. "Realmente no existe ninguna técnica para detectar a un mentiroso. Algunos de los indicadores en los que te puedes fijar es en su carácter de duda, la expresión negativa, su desvío de la atención o el distanciamiento. La poligrafía estudia un aspecto de la mentira, la activación fisiológica, pero no es un buen instrumento", ha indicado el experto.