Asciende a 93 el número de personas muertas por los incendios forestales en Hawái
Las autoridades hablan ya del "desastre natural más grande" de la historia de la isla estadounidense. Dos de los tres focos de llamas permanecen activos, mientras los equipos de emergencia continúan rastreando las zonas devastadas en busca de posibles nuevas víctimas
Madrid
El gobernador de Hawái, Josh Green, ha elevado este domingo a 93 el número de muertos por los incendios forestales de la isla de Maui, y se espera que la cifra siga aumentando en las próximas horas a medida que se examinen el conjunto de las zonas devastadas. Dos de los tres focos de llamas que surgieron en Maui siguen activos, según el último balance del condado.
Las autoridades hablan ya de estos enormes incendios forestales como "desastre natural más grande que Hawái jamás haya experimentado". Los datos avalan esta consideración ya que, en efecto, estos fuegos son son oficialmente el desastre natural más mortífero de Hawái en la historia del estado, tras superar las 61 muertes que dejó un tsunami ocurrido en 1960.
"En los próximos días, mientras caracterizamos cuántas personas hemos perdido (y cuántas personas vendrán) a nuestra comunidad... a corto plazo será desgarrador y a largo plazo, la gente necesitará servicios de atención de salud mental y, a muy largo plazo, reconstruiremos juntos", ha asegurado Green.
Las pérdidas materiales son también especialmente graves, con una estimación que ronda los más de cinco mil millones de euros. 2200 estructuras han sido destruidas o dañadas, de las que el 86% son residenciales y la mayoría están localizadas al oeste de la isla hawaiana.
Según las autoridades locales, más de 14.000 personas fueron evacuadas durante el pasado miércoles, mientras que cerca 14.500 fueron trasladadas a otras islas cercanas a lo largo del viernes. Por el momento, las autoridades han confirmado que las llamas en la zona de Lahaina están controladas en hasta un 85% en unos incendios que, según los expertos, afectan notablemente y en todos los aspectos a la salud de los vecinos.
Richard Bissen, el alcalde de Lahaina, antigua capital del archipiélago y una de las zonas más turísticas de Hawái, aseguró en la víspera que el 80% de la ciudad ha quedado completamente destruida por las llamas, que fueron avivadas por el huracán Dora.