Los bomberos encuentran 27 cuerpos quemados en la zona de Avantas, al norte de Grecia, por los incendios forestales que han calcinado ya 43.000 hectáreas
Los incendios han obligado a desalojar un hospital en Grecia y el calor mantiene en alerta a Francia e Italia. El sur de Europa se enfrenta a temperaturas que superarán los 40 grados en varias regiones
Madrid / Lyon
El hasta medio centenar de incendios se han registrado en las últimas 24 horas en Grecia ha destruido ya más de 43.000 hectáreas. El país sufre el acoso incesante de las llamas desde el inicio de la ola de calor que mantiene en máxima alerta a distintas partes de España, Francia o Italia además de al país heleno.
Lo peor está en la zona fronteriza con Turquía, en concreto en la ciudad de Alejandrópolis, en la que se ha tenido que evacuar a decenas de pacientes de un hospital por la cercanía de las llamas. Cerca de allí, los bomberos han encontrado 27 cuerpos calcinados en un bosque de la zona de Avantas, al norte de Grecia, un trágico hallazgo que según el ministro de Inmigración, Dimitris Kairides, "confirma los peligros de la inmigración irregular".
Las autoridades creen que 27 de los muertos son migrantes que "probablemente habían entrado de manera irregular" en el país tras cruzar el río Evros, fronterizo con Turquía, murieron mientras escapaban de las llamas. El forense que examinó los cuerpos ha declarado que todos eran varones, entre los que hay dos niños. La policía griega investiga en este momento lo sucedido. La víctima mortal que elevó la cifra total a 28 es un ganadero que fue engullido el lunes por el fuego mientras trataba de salvar a sus animales.
Estamos pasando por horas críticas bajo condiciones meteorológicas extremas y vientos muy fuertes
— Ioannis Artopios, portavoz de los bomberos
En la zona se han evacuado varias poblaciones debido a la cercanía de las llamas, azuzadas por las altas temperaturas, la sequedad y los fuertes vientos.
Los incendios mantienen Alejandrópolis bajo una lluvia de cenizas y otros ocho municipios colindantes han recibido órdenes de evacuación al tiempo que bomberos y equipamiento llegados de Chipre y Rumanía tratan de ayudar a los agentes griegos a hacer frente al fuego.
También la Unión Europea ha movilizado recursos una vez que Grecia ha pedido ayuda. En la rueda de prensa diaria, el portavoz comunitario Balazs Ujvari ha detallado que en el caso de Grecia "se han movilizado siete aviones y un helicóptero para la extinción de incendios, y se les ha proporcionado imágenes de satélite de los focos". Ujvari ha explicado además que España no ha pedido esa ayuda, pero que nuestro país tiene a su disposición imágenes de satélite de los fuegos de Tenerife.
Aunque es el noreste del país la zona que ahora está en mayor riesgo, hay focos activos en distintos puntos de toda Grecia. En la capital, en Atenas, se esperan hoy temperaturas de hasta 36º.
Francia vive la peor ola de calor después de un 15 de agosto
Este lunes, 21 de agosto, Francia registró una media en el termómetro en todo el país de 26,63 grados. Es el récord absoluto después de un 15 de agosto y avisa de la posiblemente peor oleada de calor de su historia en estas fechas, que debe alargarse hasta el viernes. Actualmente, más de la mitad del territorio se encuentra en alerta naranja por canícula y cuatro departamentos pasan a partir de este martes a las 15 horas a alerta máxima roja. Se trata de cuatro provincias en torno a la ciudad de Lyon y del valle del Ródano, donde las temperaturas deben superar los 40 grados.
El domingo ya se batió un récord absoluto de calor en el municipio de Vinsobres, en la Provenza, con 42,1 ºC. Lo que puede parecer normal en algunas zonas de la Península Ibérica, no lo es tanto en Francia donde la población no está preparada para este tipo de temperaturas y durante tanto tiempo. Aunque sí es habitual en oficinas y centros comerciales, en las casas raramente hay aire acondicionado. Por ello, las autoridades redoblan esfuerzos para prevenir a las personas más vulnerables con un número de teléfono específico en caso de urgencia y la extensión de los horarios en los parques hasta medianoche, como en Lyon. Las residencias geriátricas, por su parte, también admiten personas externas para las comidas.
El propio ministro de Sanidad, Aurélien Rousseau, declaró a la televisión BFMTV que, en el valle del Ródano, este martes se esperan “niveles de temperatura nunca registrados en Francia”. El servicio metereológico francés constata que las temperaturas mínimas estos días no descienden de los 20-22 ºC y, localmente, en las zonas urbanas, de los 23-25 ºC. Mientras que las máximas se sitúan, en general, entre los 36-39 ºC.
El fuerte calor se mantendrá hasta mediados de semana, con entre 39 y 42 ºC el miércoles y el jueves en el suroeste del país -en las regiones de Toulouse y Burdeos- y el valle del Ródano. Algo que lleva a Météo-France a afirmar que este episodio podría convertirse “en el más caluroso del verano” y que alcanzará también la fronteras del nordeste del país, con Alemania, el valle del Loira y la cuenca parisina.
Signo del récord del lunes de temperatura media, lo es que en la ciudad costera de Menton, cerca de Mónaco, durante la pasada noche el mercurio no descendió de los 30 ºC y, en Niza, de los 28,6 ºC. “Si se mira la serie histórica, los episodios de fuerte calor se producían siempre durante el mes de julio, pero las simulaciones de los investigadores del GIEC (Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático) no dejan lugar a duda: la frecuencia, la duración y la intensidad de las canículas aumentarán”, sentencia Christine Berne, climatóloga de Météo-France, a la radio pública francesa.
Récord de “cero grados” a 5.298 metros de altitud
Otro dato alarmante es que el servicio meteorológico de Suiza registró la noche del 20 al 21 de julio pasado un récord de “cero grados” a 5.298 metros de altura. El llamado nivel de congelación de la atmósfera sirve para determinar las previsiones de pluviometría y el mantenimiento de los glaciares. El anterior récord es de solo julio de 2022, con 5.184 metros. Dada la situación de riesgo actual en los Alpes de desprendimiento de rocas, la prefectura de la Alta Saboya recomienda a los alpinistas que aplacen las subidas al Mont Blanc.