Vivek Ramaswamy, la estrella en ascenso de los Republicanos

Madrid

Esta pasada madrugada, tuvo lugar el primer debate televisado entre los candidatos a las primeras del partido republicano. Faltaba Trump, que una vez más y haciendo gala de su soberbia habitual, se fue a una entrevista en una cadena de Televisión asegurando que tendría mucha más audiencia que el debate de los candidatos, y que, además, no tenía la paciencia para aguantar los ataques desaforados de sus compañeros de filas.

Así que en ese debate, destacó una estrella. Se llama Ramaswamy. Y sinceramente se llevó el espectáculo de calle. Joven empresario de 39 años, de origen indio, con don de palabra, atractivo para la cámara, y que repartió estopa desde el minuto uno contra sus rivales mientras que, a sí mismo, se presentaba como el único de los cinco que no venía con agendas ocultas ni manejadas por intereses oscuros

Tuvo el micrófono y la cámara más tiempo que ninguno, y fue el foco de las críticas de sus compañeros de partido, incluso de políticos tan experimentados como Chris Christie, ex gobernador de Nueva Jersey o el exvicepresidente Mike Pence.

Entro siendo un desconocido y terminó el debate legitimado y con una candidatura fortalecida que hoy le sitúa de número tres en las encuestas de intención de voto de los Republicanos.

La verdad es que no dijo muchas verdades, uso la técnica de lanzar falsas teorías o crear polémicas ficticias, pero le surtieron efecto. Usando la técnica de Trump, de esparcir mierda para que huela mal por todos los lados y no solo en tu puesto, porque eso es lo que funciona en aquel país dentro del espectro Republicano.

Pero fíjense que algunos descubrieron a la auténtica joya de la noche. Es Nikki Haley, que fue gobernadora de Carolina del Sur y ex embajadora de Estados Unidos ante la ONU. Nombrada por el propio Trump, y peso pesado del partido, es una diplomática lúcida, centra y equilibrada. Tiró de autocrítica y propuso soluciones, dentro del abanico conservador, pero perfectamente asumibles en un país totalmente polarizado como es Estados Unidos.