La tormenta «Daniel» que azota este miércoles a Grecia por segundo día es el fenómeno meteorológico más extremo nunca registrado en el país, con niveles de precipitaciones nunca vistos, con dos muertos y tres personas desaparecidas. Unas lluvias que la televisión pública del país califica de «desastre bíblico». Los servicios de emergencia han localizado este miércoles el cuerpo de una mujer de 85 años en la costa de la península de Penión, un día después de que se confirmase el fallecimiento de un ganadero sepultado por un muro en la cercana localidad de Volos, según la cadena de televisión ERT. Una de las representantes del gobierno regional de Magnesia, en el centro de Grecia, Nancy Kapoula, ha explicado en la televisión pública griega que se vive una «catástrofe sin precedentes». Kapoula ha avisado de la virulencia con la que baja el agua y el barro por algunas ciudades, hasta el punto de que la localidad de Volos, la sexta más grande de Grecia, ha quedado llena de lodo. Diluvia también en Bulgaria y en Turquía. Precisamente, en Turquía al menos diez personas han muerto y otras tres siguen desaparecidas, debido a las riadas que afectan a distintas partes del país, especialmente a la zona fronteriza con Bulgaria. En Kirklareli, en el extremo noroeste de Turquía, se han localizado tres cadáveres, que se suman a los dos encontrados ayer, de un grupo de doce personas que quedó atrapado en un hotel y fueron arrastrados por la riada. Seis personas fueron rescatadas y otras tres siguen desaparecidas. La riada arrastró varios bungalós y los seis supervivientes pudieron ser rescatados con la ayuda de barcos y de maquinaria pesada, informó la televisión turca NTV. Además, dos personas han muerto en Estambul, a unos 220 kilómetros al norte, debido a las fuertes lluvias que han dejado miles de casas inundadas. El valle de Sisli se halla a una decena de kilómetros al sur de la frontera búlgara y a menos de veinte del municipio de Tsarevo en Bulgaria, donde hoy también fallecieron al menos dos personas, al ser arrastrado su coche por una riada. En Bulgaria se ha confirmado la muerte de tres personas, cifra que puede aumentar porque continúa la búsqueda de al menos una persona más. La tormenta ha dejado carreteras impracticables, viviendas inundadas y cortes en el suministro eléctrico en este país. Varias estaciones de metro de Turquía han quedado anegadas y un hospital se ha visto también muy afectado. Una docena de personas fueron rescatadas después de quedar atrapadas en una biblioteca. El gobernador de Estambul, Davut Gul, ha indicado que en las últimas horas han caído tanta agua como lo que suele llover en dos o tres meses.