El terremoto de Marruecos deja ya casi 2.500 muertos y otros 2.476 heridos

El terremoto que sacudió la región de Marrakech el pasado viernes por la noche ha causado ya 2.497 muertos y 2.476 heridos, si bien no se descarta que la cifra pueda seguir aumentando por el elevado número de heridos y la búsqueda de más posibles víctimas entre los escombros. Sólo a la provincia de Al Hauz corresponden más de 1.400 víctimas mortales, mientras que en Tarudant han perecido más de 760 personas, de acuerdo con el recuento oficial. Las autoridades de Marruecos prosiguen con los trabajos de asistencia a las zonas afectadas. Los esfuerzos se concentran todavía en la búsqueda de las víctimas y de posibles supervientes, tareas para las cuales se han activado todos los mecanismos. Por ahora, el Gobierno marroquí sólo han aceptado la ayuda de España, Reino Unido, Qatar y Emiratos Árabes Unidos. Otros países también se han ofrecido a enviar equipos; por ahora sin el aval de Rabat. A primera hora de este domingo, el ministro de Asuntos Exteriores en funciones, José Manuel Albares, confirmaba la solicitud de ayuda de Marruecos para ayudar en las tareas de rescate y desescombro. «Esta madrugada he recibido la llamada de mi colega, el ministro de Exteriores de Maruecos, que oficialmente ha solicitado la ayuda de España», anunciaba. Inmediatamente se ponía en marcha la cooperación con el país africano y un avión del Ejército del Aire salía con rumbo a Marrakech. Un primer contingente de rescate de la Unidad Militar de Emergencias (UME), compuesto por 56 militares y cuatro perros, llegaban por la tarde a Tala NYaaqoub, una zona situada a 25 kilómetros del epicentro del seísmo. De hecho, las autoridades marroquíes han delegado en la UME la gestión de la respuesta de emergencia. Marruecos ha designado a la UME como RDC (Reception and Departure Center), es un elemento fundamental en la organización de la respuesta a la emergencia, cuyo cometido es el de recibir a los equipos USAR que acceden a la zona de la catástrofe, coordinarlos, en apoyo a las autoridades de la nación anfitriona, y proporcionarles instrucciones para su despliegue, así como la información actualizada sobre la situación en la zona. Además, un equipo de 30 personas de la Unidad Especial de Emergencia y Respuesta Inmediata de la Comunidad de Madrid (Ericam) se dirigía a la zona para reforzar la ayuda. «Lo ideal es llegar las primeras 24 horas, que es cuando mayor número de víctimas vivas se puede rescatar», señalaba la jefa de equipo del Ericam, Annika Coll, en Hora 14. La rescatista con experiencia como el terremoto de Turquía contaba las particularidades del terreno al que se enfrentan en Marruecos: zonas rurales de difícil acceso, infraestructuras precarias y edificios construidos con adobe, que generan menos huecos de vida grandes que los escombros de hormigón. Y desde la ONG Bomberos Sin Fronteras, un grupo de voluntarios han partido desde diferentes puntos de España para aportar su granito de arena. El presidente de la organización, Nicolás Nogales, contaba también en Hora 14 cómo se habían organizado para llegar los primeros al epicentro del terremoto para desplegar todos sus medios y comenzar las labores de búsqueda y rescate. «Nos hemos desplazado en dos vehículos a través del puerto de Algeciras y hemos tenido la oportunidad de llegar de manera autónoma con los vehículos que transportamos. Lo que vamos a hacer es lo más importante en esas primeras horas, localizar a las personas que pueden estar sepultadas arriba con los perros de rescate», señalaba. Toda la ayuda es bienvenida y por ello, Marruecos ha aceptado la cooperación de Reino Unido, Emiratos Árabes y Catar. «Una vez se detecta la necesidad, nos comunicamos con los que han hecho la oferta que corresponde a esa necesidad para decirles que por favor aporten esa ayuda», ha precisado el Gobierno marroquí. Los países del G20 también han ofrecido su apoyo y Argelia, país que no mantiene buenas relaciones diplomáticas con Marruecos, ha abierto su espacio aéreo para desplazamientos humanitarios. Sobre los turistas españoles atrapados en Marruecos, Albares ha reiterado que se pongan en contacto con el Consulado y ha admitido que el Gobierno está trabajando para repatriarlos, una opción que descartó el sábado. «Estamos hablando con Iberia y Binter para que los vuelos que operan a Canarias tengan más capacidad para poder repatriar a los españoles. También tenemos en cuenta esa situación y estamos centrándonos en repatriar a esos españoles», ha manifestado. Alegría en muchos aeropuertos españoles al recibir a aquellos que vivieron el terremoto con angustia y miedo, pero que, por suerte, han podido escapar de la pesadilla. «Fue una sensación de que se va a abrir la tierra y te va a tragar. Fue muy angustioso», decía María Ramón, recién aterrizada esta tarde en el aeropuerto de Valencia a bordo de un vuelo procedente de Marrakech, y quien todavía no encontraba las palabras exactas para describir lo que ha vivido. Sin embargo, aún hay muchas personas en las zonas afectadas por el temblor que no podrán regresar a sus casas porque las han perdido. ONGs como Aldeas Infantiles ya se han puesto manos a la obra para prestar ayuda humanitaria, aunque será un proceso largo y los expertos advierten que no se descartan réplicas del terremoto, aunque de menor intensidad. «Pueden producirse durante uno o dos meses», decía en Hora 14 el sismólogo marroquí Taoufik Mourabit.

El terremoto de Marruecos deja ya casi 2.500 muertos y otros 2.476 heridos

Las autoridades marroquíes prosiguen con la búsqueda de víctimas y posibles supervivientes y, por el momento, sólo han aceptado la ayuda de algunos países

Sandra Fernández Pérez

Webs de PRISA