Zonas rurales, de difícil acceso y con casas de barro: una rescatista explica las particularidades del terremoto a la hora de encontrar supervivientes

El terremoto que ha sacudido Marruecos ha afectado sobre todo a zonas rurales y ha derribado edificios que contaban con estructuras muy débiles, algunas construidas con barro o materiales que no estaban del todo homologados. Estas particulares son importantes a la hora de planificar el rescate de víctimas que han podido quedar atrapadas bajo los escombros y salvar sus vidas. Las primeras horas son cruciales y los equipos de rescate trabajan a destajo para poder salvar al mayor número posible de víctimas. Annika Coll es oficial de Bomberos y rescatista con experiencia en terremotos como el de Turquía. Además, es la jefa del equipo de Emergencia y Respuesta Inmediata de la Comunidad de Madrid, y ha sido enviada por el Gobierno español para ayudar a Marruecos en los rescates. «Lo ideal es llegar las primeras 24 horas, que es cuando mayor número de víctimas vivas se puede rescatar», señala en Hora 14. Coll explica que el hecho de que la mayoría de edificios estén construidos con adobe, hace que sea un tipo de rescate diferente y genera menos huecos de vida que los escombros de hormigón. «Son bastante laboriosas y lentas las labores de rescate porque hay que ir atravesando capas de hormigón. Entonces, dependiendo la situación es más fácil o más difícil. Es cierto que lo que hay es más ligero lo que tienes encima, en ese sentido está bien, pero hay menos posibilidad de huecos de vida grandes que eso sí ocurre con las estructuras de hormigón», explica. Las técnicas de rescate también son muy diferentes, porque en los casos de hormigón se necesitan herramientas de corte muy complicadas y se tarda más. «En este tipo de estructuras de fábrica o de adobe hay que saber dónde pueden estar las víctimas y saber encontrarlas sobre todo y sacarlas bien, pero no necesitas ir cortando esas capas que se tarda mucho, mucho tiempo», indica. Otra de las particularidades de este terremoto es que hay muchas zonas afectadas, que son de difícil acceso, que son poblaciones muy pequeñas en zonas montañosas, lo que ralentiza la llegada de los equipos de emergencia. «Por una parte, hay una demora en la información y hay una demora en la llegada de los equipos de rescate, porque además normalmente a zonas tan remotas, pues las infraestructuras, las carreteras, es más fácil que estén dañadas y que no se reparen al no usarlo tanta gente», explica. Las horas son cruciales para que las víctimas sobrevivan y las condiciones también influyen. «La víctima que más tarde fue rescatada fue en el día 7 y salió con bien. O sea, no tuvo unos daños muy muy graves, pero no es lo normal. Depende mucho de las personas y depende mucho de la situación de humedad, calor, frío.... Si tiene lesiones o está atrapada... Varía mucho de una persona a otra, con lo cual es muy difícil decir», responde sobre cuántas horas o días pueden estar atrapadas las víctimas con vida. «Después de una semana es altamente difícil. Es muy difícil. Hay casos documentados de bastante más tarde, pero en general es porque tengan suministro de agua o estén en una situación muy óptima», concluye.

Zonas rurales, de difícil acceso y con casas de barro: una rescatista explica las particularidades del terremoto a la hora de encontrar supervivientes

La jefa del equipo de Emergencia y Respuesta Inmediata de la Comunidad de Madrid, Annika Coll, es una de las enviadas para tratar de rescatar a los superviventes del seísmo

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