Marta Nieto “On Fire”
La actriz ha estrenado tres películas en los dos últimos fines de semana: La manzana de oro de Jaime Chávarri; ¡Salta! de Olga Osorio y Verano en Rojo, dirigido por Belén Macías. Además, acaba de presentar una película en Francia, Visions, en la que comparte reparto con Diane Kruger y Mathieu Kassovitz. Y, por si todo esto fuera poco, está terminando la postproducción de La mitad de Ana, su primer largometraje como directora.
Este septiembre es el mes de la actriz Marta Nieto, aunque para ella es algo circunstancial. “Son estas cosas que pasan y que son azarosas. La semana pasada, cuando supe que el calendario iba a ser así, no pensé que iba a ser tan exigente. La verdad es que me pongo muy vulnerable porque son personajes muy distintos; que has hecho en momentos muy distintos y que se merecen todo de mí cuando los tienes que contar. Exponerme tanto me genera mucha responsabilidad”, nos cuenta durante la promoción de ¡Salta!
Tres personajes muy distintos en tres géneros cinematográficos diferentes. En La manzana de oro interpreta a una joven poeta; en ¡Salta! a una matemática que se ve envuelta en un viaje en el tiempo y en Verano en rojo a una inspectora de policía que tiene que investigar las misteriosas muertes de unos jóvenes. “Siempre quise poder dedicarme a esto eligiendo dónde ponía la energía y el corazón. También te digo que tengo la sensación de que acabó de empezar. Me siento capaz de asumir estas responsabilidades porque he madurado y soy capaz de saber quién soy; qué herramientas tengo; hasta dónde puedo llegar y qué quiero. Y me atrevo a hacerlo”, explica convencida.
Pero Marta Nieto no es precisamente ninguna recién llegada al oficio. Lleva en el mundo de la actuación desde comienzos de este siglo y ya sabe lo que es tener un gran éxito, tanto nacional como internacional, por su trabajo. Por Madre, de Rodrigo Sorogoyen, ganó el premio a la mejor actriz en la sección Horizontes del Festival de Venecia en 2019 y el Forqué a la mejor interpretación femenina. Además, estuvo nominada a los premios del cine europeo; a los Goya y a los Feroz. “Para mí interpretar tiene que ver con entender la materia humana”, nos cuenta. “Desde ahí es de donde yo me siento capaz y libre para explorar. Es un lugar de mucho trabajo personal porque cuanto mejor me entienda y cuanto más consciente sea de quién soy; qué quiero y qué herramientas tengo, mejor interpreto”, afirma. Y añade: “Es muy guay llegar al personaje porque es un proceso de búsqueda que es mi lugar favorito. El proceso creativo es mi espacio, ese proceso de ensayo y de error. Luego tienes que rodarlo o que actuarlo en el teatro y entonces ya vas viendo que es finito. Tomas las decisiones y en ese momento ya lo estás soltando, porque ya está formándose el personaje. Cuando acabas, ya tiene poco que ver contigo. Tiene mucho de ti, pero poco que ver contigo. ¡Ojalá hubiera más tiempo de ensayos!”, nos dice entre risas.
El año pasado Marta Nieto debutó como directora, con el cortometraje Son, en el que abordaba la infancia trans. Una exploración sobre la identidad que continúa con La mitad de Ana, su primer largo como realizadora, que se estrenará el año que viene. “Cómo son cosas que no he hecho antes, me ciño a lo que hago en este momento porque si me pongo a pensar en qué va a pasar, me bloqueo. Intento no tener muchas expectativas; estar haciendo lo que tengo que hacer ahora y que lo que hago, me guste; que haya una vibración armónica y sacar lo mejor de lo que ocurre. No voy mucho más allá. Ya te contaré”, afirma.
Lo que está claro es que, como artista, no quiere acomodarse. “Quiero asumir retos. Sigo luchando con mis miedos, claro que sí y con mis inseguridades. Hay unos lugares donde ya estoy más o menos cómoda, pero no me puedo relajar porque trabajas con materia invisible, que está en constante cambio. Es mejor mirar los miedos; tenerlos cerca y no darlos por hechos porque entonces te pueden comer”.
Y una última reflexión sobre el paso del tiempo. Yo soy consciente de que el tiempo es relativo. Últimamente pasa muy rápido y aún siendo consciente de que pasa muy rápido, quiero estar presente. Creo que encajo mejor la conciencia del paso del tiempo a través de las emociones. Ahí es donde viajo cuando quiero recordar algo porque va tan rápido que ni siquiera las imágenes se me quedan nítidas”.
Elio Castro
Licenciado en Historia del Arte y Máster en periodismo por la Universidad Autónoma/El País. Periodista...