Marina Marroquí, sobre el porno que ven ya los niños: "No es lo que tenéis en la cabeza. Es mucho más sádico y violento"
Incesto, pederastia, violaciones múltiples, vejaciones y sadismo. Marina Marroquí, educadora social y especialista en violencia de género, analiza la pornografía a la que tienen acceso los niños incluso a los 9 años.
Marina Marroquí, educadora social: “No es el porno que tenéis en la cabeza, es mucho más sádico y violento”
Madrid
'Generación Porno' es una serie documental coproducida por la ETB, TV3 y Shine Iberia, que se estrena este viernes 22 en la televisión pública vasca y el próximo martes 26 en la catalana. El documental reúne a padres e hijos para hablar sobre pornografía y su impacto en la educación sexual de los menores. Marina Marroquí, educadora de amplia experiencia en violencia de género y sexualidad adolescente, es una de las especialistas que ha participado en esta producción.
"Cuando seáis un poco más mayores vais a odiar el porno, porque os ha robado lo que es el sexo de verdad", cuenta Marina Marroquí que les explica a los chavales al final de los talleres sobre sexualidad que da por toda España y que siempre acaban con una imagen desoladora: una cola de "23, 30 chicas, de 12, 13, 14 años, de entre un auditorio con 500 chavales, que me esperan para contarme las violaciones que han sufrido. Esto cada tarde. En cada ciudad".
Marina, autora, además, de los libros "Esto no es sexo" y "Esto no es amor" ha explicado que "el porno te enseña a ejercer la violencia, la dominación y la agresividad contra otra persona", y que cuando habla con los chavales les dice que prueben el amor y el sexo de verdad: entonces entenderán el fraude que han vivido.
El control parental no es suficiente: cómo proteger a los menores de la pornografía en Internet
"Mi madre y su madrastra me la chupan a la vez" o "La zorra salvaje disfruta de esas bofetadas. Náuseas y garganta profunda" son títulos "normales" de los vídeos pornográficos que están al alcance de cualquiera en Internet. Incluido niños de 9, 10, 11 años, la edad a las que los varones ven porno por primera vez. "Estoy conmocionada", ha confesado la colaboradora Aitana Castaño, que ha visto los dos primeros capítulo.
"Las manadas de adolescentes están relacionadas con el consumo de porno"
Nacho Carretero, por su parte explica que le preocupan "las consecuencias que están por venir". "Porque cuando yo era pequeño el porno era una cosa excepcional: un compañero alquilaba una cinta de VHS, por ejemplo. Pero esta es la primera generación que tiene un acceso libre al porno", ha señalado.
Unas consecuencias que se están empezando a ver. Esta misma semana hemos conocido el caso del colegio de Almendralejo, en el que han aparecido fotos de niñas desnudas generadas por Inteligencia Artificial y compartidas en las redes sociales de los chavales. Y las noticias sobre violencia sexual entre menores son cada vez más frecuentes. Los vídeos de violaciones grupales son los más vistos cada año en internet. "Las consecuencias las estamos viviendo", explica Marina. "Tantas manadas de adolescentes son un indicador claro del consumo de porno. Desde 2016, el año de la violación de la manada el vídeo más visto siempre ha sido una violación grupal. Siempre."
Son imágenes que evidentemente tienen un impacto en la conducta de los niños. Las familias dicen "mi hijo no puede ser", por eso los estudios de las Universidades de La Rioja o Illes Balears son tan importantes, para poder contar con datos fiables. Y no es que niños tan pequeños, de 9 o 10 años, vayan buscando porno: "El porno les encuentra a ellos. No lo buscan hasta años después. Uno de los principales canales por los que el porno capta al adolescente es a través del chat de la Play [Station]: ahora tu hijo puede estar sufriendo barbaridades y tú tan tranquila pensando que está jugando al fútbol en la consola".
"Hay ocasiones que chavales me dicen: pero si solo me estaba bajando una aplicación para hacer matemáticas. Da igual, les captan a través de stickers, a través de enlaces... Las madres me dicen super convencidas que registran los móviles de sus hijos y no ven porno. Y yo les digo: pero es que los enlaces no se guardan", ha explicado Marroquí, quien sostiene que "el porno se ha convertido en un socializador más que en un aprendizaje del sexo. Sin las medidas y la legislación necesaria, hoy el porno en edades tempranas es inevitable," concluye.
"No podéis tener hijas de 11 años sin saber qué es OnlyFans, porque ellas sí lo saben"
"Legislar es importante", reflexiona la especialista, pero no es lo único. "También es importante visibilizar a la adolescencia sin criminalizarla, porque la adolescencia es hermética, todos hemos sido adolescentes. Hablar con los amigos no es lo mismo que hablar con tu padre o tu madre. Conseguir ese clima es uno de los méritos del documental. Y también ese afán de promover una asignatura en las escuelas y una legislación que cape el porno", razona.
"Las familias tenemos un papel importante: primero, el de aprender y saber", explica Marroquí, que se ha dirigido en este punto directamente a los padres que estaban escuchando: "No podéis tener hijas de 11 años sin saber lo que es OnlyFans o un Sugar Daddy. Porque ellas sí lo saben". La educadora ha señalado que este proceso de conciencia y descubrimiento de los contenidos que consumen los hijos causa daño a las familias, pero insiste en que es preciso afrontarlo.
"Sé que duele. Yo veo cómo las familias se van rompiendo poco a poco, porque son contenidos violentísimos", ha recordado, por las experiencias que se ha encontrado en los talleres y las formaciones que imparte. En ese punto, y para subrayar la carga violenta del contenido al que los jóvenes tienen acceso prácticamente ilimitado, ha vuelto a dirigirse directamente a los padres y madres para recordarles algo importante y hacer una categorización escalofriante:
"No es el porno que tenéis en la cabeza. Es muchísimo más sádico y violento. Y hablamos de vídeos con 220.000 billones de visitas. Además, una cosa es que un chaval te cuente un vídeo y otra verlo: hablamos de vídeos en los que las chicas no acaba viva. Y podemos dividir este contenido en cuatro grupos: incesto, pederastia, violaciones grupales y sadismo y vejaciones", ha explicado.
Un trabajo de desintoxicación
La solución no acaba con la limitación del acceso a la pornografía. Tras años de contacto con ella, tras haber "aprendido" el sexo con esos contenidos, los niños y jóvenes tienen por delante un trabajo de desintoxicación similar al que tendrían que afrontar para superar una adicción a las drogas. Marroquí lo explica con una comparación muy gráfica: "Aprender sobre sexualidad a través de la pornografía es como aprender a conducir viendo 'Fast and Furious'. Pero en el mundo de la conducción hay anuncios de la DGT, hay un carnet por puntos, existe todo un sistema que contrarresta esa información. En el porno, no."
Marroquí apunta que las chicas terminan accediendo al porno más tarde que los varones, y para tener información sobre lo que los chicos ya piden, por lo que reciben "una información completamente sesgada" y ese problema persiste en los adultos. Ella ha comentado que a sus monólogos va un 80% de mujeres, y solo un 20% de hombres, y en esta cuestión la implicación de los hombres en general y de los padres, es fundamental.
Eva Cruz
Redactora en el magazine de 'Hoy por Hoy' desde...