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Radiografía de una investidura abocada al fracaso pero de la que todos los partidos salen satisfechos

Feijóo sabía que no contaba con los apoyos, pero su discurso duro contra Sánchez ha reforzado su liderazgo interno en el PP. Por su parte, en el PSOE están contentos con su estrategia de sorprender con Óscar Puente como interlocutor

Radiografía de una investidura abocada al fracaso pero de la que todos los partidos salen satisfechos

De nada han servido los llamamientos de algunos dirigentes populares a la "responsabilidad individual" de los diputados socialistas. La foto final que iba a dejar este debate de investidura estaba clara mucho antes de comenzar: Feijóo no ha conseguido la mayoría suficiente para ser investido presidente del Gobierno. 172 diputados han votado a favor, mientras que 178 lo han hecho en contra.

Por su parte, en el PSOE están contentos con su estrategia de sorprender con Óscar Puente como interlocutor, tal y como han asegurado tanto delante como fuera de las cámaras. Consideran que han logrado desviar la atención y ya se preparan para que, una vez el rey le encargue a Sánchez presentarse a la investidura, ponerse manos a la obra para tratar de conseguir que esos 178 noes de este miércoles, se conviertan en síes en unas semanas.

El líder del PP sabía que iba a salir de la cámara con una derrota parlamentaria, pero aun así el PP sale satisfecho. Creen que Feijóo, que ha sido despedido en pie y entre aplausos de los suyos, es hoy más líder que antes de comenzar. Él mismo ha respondido a la pregunta de si cree que seguirá al frente del partido y como líder de la oposición: "Después de este resultado creo que hay pocas dudas".

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De esta forma, en el PP consideran que el objetivo se ha cumplido, aunque reconocen a la Cadena SER que en la práctica hay poco que celebrar. Si algo se ha llevado Feijóo tras escuchar a todos los grupos parlamentarios es un baño de realidad, como por ejemplo el que le ha dado Aitor Esteban, portavoz del PNV, dejando claro que su alianza con Vox cierra cualquier opción de acercamiento al nacionalismo vasco y catalán: "Si es con nosotros o con Junts, debe empezar a contar descontando 33 (en referencia al número de diputados de la extrema derecha).

Precisamente con Esteban, desde la bancada popular han tratado de desplegar una doble estrategia, intentando hurgar en sus contradicciones: "La propuesta de Sumar, de Bildu, de ERC... ¿Esta es la propuesta del PNV para Euskadi?", le ha espetado Feijóo al portavoz nacionalista. Al mismo tiempo, buscaba un acercamiento a su votante moderado: "Si los vascos quieren confiar en un partido que apueste por el rigor, por la gestión de las cosas públicas, por la moderación... También tienen un partido, que es el PP del País Vasco".

Sin embargo, la réplica más dura de Feijóo ha ido dirigida a EH Bildu: "Para mí todo lo que diga Bildu, que no venga precedido por una disculpa real a todas las víctimas de ETA, no tiene ningún valor", ha indicado el candidato. En este sentido, el grupo popular no le ha concedido ni el gesto de atender a la traducción cuando Aizpurúa ha utilizado el euskera en su intervención. Pero el mensaje más claro, se lo ha dado la portavoz abertzale en el idioma común: "Se lo voy a decir en castellano para que lo entienda. Euskal Herria Bildu le va a dar un no rotundo".

Y es que el PP ha tenido una tregua en turno de los dos portavoces del grupo mixto que han votado a favor: UPN y Coalición Canaria. Y también en la defensa Férrea que le ha brindado Cuca Gamarra, su número dos: "Votaremos sí, porque en nuestra democracia quien gana las elecciones siempre ha merecido gobernar".

Así, el candidato ha cerrado el debate como lo empezó, disparando a Sánchez por una hipotética amnistía, asegurando que en los plenos del Congreso "nos hemos retratado todos, con nuestras palabras y nuestros silencios".