"Cuando hay una orden de paralización de la actividad, se tiene que precintar el local": un experto, sobre las discotecas incendiadas de Murcia

Las autoridades locales de Murcia han confirmado hoy que las discotecas incendiadas el pasado fin de semana funcionaban sin licencia desde enero de 2022. En esa fecha, se decretó el cese de actividad del local cuando se comprobó que se había dividido para un uso por separado de los dos locales, Teatre y Fonda Milagros, ya que no tenía permiso para hacerlo. Hay un acta de un inspector de octubre del 2022 en el que «se requirió el cumplimiento de ese cese» pero desde entonces no hay constancia en el ayuntamiento sobre la actividad de este local. «Depuraremos todas las responsabilidades», ha insistido el concejal socialista Andrés Guerrero, que ocupó la concejalía de urbanismo la pasada legislatura. La tragedia ha provocado 13 muertos, según Delegación del Gobierno en Murcia, y se ha decretado el secreto de sumario en la investigación policial. Hay varias cuestiones que siguen sin resolverse, entre otras el origen del fuego, su propagación a otros locales o por qué las autoridades de la ciudad no precintaron las discotecas pese a que estaba dictada la orden. En «Hora 25» con Aimar Bretos hemos preguntado a Carlos Amoedo, profesor de Derecho Administrativo de la Universidad de A Coruña. «Es bastante sorprendente que, por los datos que estamos conociendo, no sepamos todavía cuál ha sido el problema para que un acto administrativo de paralizar una actividad por carecer de la licencia, no haya sido ejecutado en tiempo y forma. Ya sea la policía municipal o el servicio local de aperturas correspondiente. Cuando hay una orden de paralización de la actividad, se tiene que precintar el local. Si hay que restaurar la legalidad se tramita, pero el hecho de que funcione sin licencia entraña unos riesgos mayores. Son actividades que conllevan riesgos para las personas», ha señalado el experto. «Probablemente ese sea uno de los caballos de batalla para saber quiénes son los responsables patrimoniales y civiles por todas las muertes que se han provocado. Uno de los requisitos para conseguir una licencia de actividades es que haya una póliza de responsabilidad civil que pueda respaldar los posibles daños. Desconocemos la anatomía de todo este expediente. Se impone una máxima transparencia en el Ayuntamiento de Murcia y lo necesario es que se ponga el expediente inmediatamente encima de la mesa para analizar la trazabilidad administrativa», ha añadido Amoedo. «Hay dos posibles responsabilidades: una del ayuntamiento por haber contribuido con su omisión de los comportamientos administrativos debidos a la provocación del daño, pero además de la responsabilidad civil subsidiaria, hay también una posible responsabilidad penal directa a los funcionarios que hayan causado arbitrariamente esa falta de ejecución del acto administrativo por una prevaricación por omisión. Si se puede demostrar que la falta de precinto se debe a una irregularidad o arbitrariedad manifiesta, estaríamos hablando de responsabilidad penal directa», ha asegurado el experto sobre las posibles consecuencias sobre funcionarios locales.

"Cuando hay una orden de paralización de la actividad, se tiene que precintar el local": un experto, sobre las discotecas incendiadas de Murcia

Carlos Amoedo, profesor de Derecho Administrativo de la Universidad de A Coruña no se explica por qué no cesó la actividad de las discotecas incendiadas

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