Andrés Lima: "La violencia juvenil existe, pero también es un terreno abonado desde los medios y la política para generar la necesidad de que debemos aumentar la seguridad"

Madrid

No le gusta que le identifiquen como una marca. "De alguna forma parece que si lo hacen te marcan como si fueras una res", señala, pero "evidentemente estoy muy orgulloso de poder hacer un tipo de teatro como el que desarrollamos con mucha gente en la compañía Animalario". Una huella que lejos de desaparecer, sigue en otras puesta en escena. "Trabajo con muchos de ellos, con Alberto San Juan, Willy Toledo, Juan Mayorga o Juan Cavestany".

Es Andrés Lima (Madrid, 1961), uno de los mejores dramaturgos de la historia del teatro en nuestro país, como se acredita en piezas como el inolvidable "Urtain", "Moby Dick", "Que te importa que te ame" o la última que estos días puede verse en Las Naves del Español en el Matadero de Madrid, "Asesinato y Adolescencia", escrita por Alberto San Juan y magistralmente interpretada por la actriz Lucía Juárez y el actor Jesús Barranco, bajo su dirección.

Antes, Lima habla con emoción y agradecimiento de su última experiencia con el público, la que le ha llevado hasta Chile con seis funciones de sus obras "Shock 1" y "Shock 2", en el marco del cincuenta aniversario del asesinato de Salvador Allende. "La verdad - confiesa Andrés Lima- es que uno va allí con mucho pudor y vergüenza a explicarles a los chilenos su historia, lo que les pasó, pensando que va a hacer el ridículo, que te van a tirar lechugas y ha sido muy emocionante todo lo que el público nos ha devuelto".

De allí se ha llevado aplausos, reconocimiento y un pin que le regaló una espectadora muy especial: la nieta de Allende. Ella le llegó a decir: que "de todos los Allendes que ha visto en el cine o en el teatro a lo largo de la historia, este era el mejor". "Un piropazo", confiesa incrédulo el director de "Urtain".

Sostiene Lima que cuando acaba sus trabajos teatrales, bien como escritor o como director o en calidad de ambas cosas, siempre le gusta ver la reacción del espectador. "Al teatro que haces hay que acompañarlo siempre, porque en todo momento hay cosas que se pueden pulir. El teatro es cambiante y se modifica dependiendo del lugar en el que se hace". Y añade: "Muchas veces la percepción que el público te da de lo que haces te sorprende".

De la obra "Asesinato y Adolescencia" dice Andrés Lima que esta, la adolescencia, es un muy buen lugar desde el que mirar el mundo. "Mi reflexión con este montaje es que en un mundo muy poblado por la violencia, que a mí es lo que más miedo me da, al final lo que ocurre es que termina aislándonos", explica. Una reflexión que va más allá en palabras de Lima cuando calcula cuánta violencia juvenil existe y cuánta creemos o nos hacen creer que existe.

"Hablando con los expertos con los que nos reunimos para elaborar el montaje, nos indicaban que la violencia juvenil, que existe, es evidente, es, ya desde la década de los sesenta, menor que la que producen otros colectivos. La violencia en el terreno adolescente siempre ha existido y siempre existirá, en un mundo que es violento esto es lógico. Pero este es un tema muy rico desde el que afirmar, a través de los medios y los políticos que estamos en peligro y poder aumentar la seguridad".