La sanidad pública solo cuenta 12.000 camas de media y larga estancia para todo el país
Son seis veces menos que la media de la OCDE. Hablamos de camas específicas para pacientes que no necesitan cuidados agudos pero que, temporalmente, se han quedado en situación de dependencia y no pueden ser atendidos en casa. Los pacientes o sus familiares se ven obligados a contratar esos servicios de forma privada
Madrid
Con una población cada vez más envejecida, el 21% tiene más de 65 años, España ha perdido, en la última década más de dos mil camas de media y larga estancia mientras se multiplican las empresas privadas que ofrecen asistencia domiciliaria. Las cirugías ambulatorias, son casi la mitad del total de las realizadas y cuando hay ingreso, la media no supera los 7 días.
Son datos extraídos del Informe 2023 sobre la Atención Especializada en las CC.AA, que cada año realiza la Federación de Asociaciones para la Defensa de la Sanidad Pública (FADSPU). Para su portavoz, Marciano Sánchez Bayle, esta situación está generando mucha inequidad. “No todo el mundo tiene capacidad económica para contratar a un especialista y poder atender, en su domicilio, a una persona mayor convaleciente que, por ejemplo, se ha roto la cadera y tiene que estar encamada varios meses. Siempre es la mujer de la familia la que se acaba haciendo cargo, sin fuerza suficiente para poder mover al paciente, sin conocimiento sanitario y, muchas veces, sin tener un lugar adecuado para realizar esa atención.”
Según publicó, el pasado mes de junio, la revista especializada en mayores 65ymás.com: “Las principales agencias online de cuidadores a domicilio, Cuideo, Cuidum, Depencare, Senniors, Aiudo, Vital Servit, Qida y Wayalia, no han parado de crecer en la última década, llegando a una facturación bruta de varias decenas de millones de euros al año, con miles de personas atendidas en toda España; sólo Cuideo, el más grande del sector, asistió a 55.000 familias en 2022”
Descenso en el número de camas de media y larga estancia por CCAA
Según el informe de FADSPU, Las Comunidades en las que más destaca esta disminución son Andalucía (que pasa de 481 a 73, lo que supone 408 camas menos), Aragón (pasa de 191 a 51, lo que supone una reducción de 140 camas), Canarias (disminuyen las camas en casi la mitad, pasando de 1.245 a 652), Cataluña (que, a pesar de ser la CC.AA. con más camas de media/larga estancia, desde el 2010 al 2020 hay 1.202 camas menos), y Extremadura (pasa de 162 a 50 camas en 2020). En contraposición a estos ejemplos de disminución en el periodo comprendido entre 2010 y 2020, nos encontramos con La Rioja, que casi dobla su número de camas hospitalarias de este tipo a lo largo de estos años.