Sam Gratton: "Para los españoles hablar en público es un reto porque cuando no estamos acostumbrados a algo nos da ansiedad"
El director de Gratton Communication enseña a empresarios españoles a mejorar su inglés para los negocios a través de vídeos que muestran los choques culturales entre países
¿Cómo aprender inglés (para negocios) de una forma divertida?
Madrid
Una conversación entre corresponsales, o excorresponsales, implica hablar de idiomas. Visitar países en los que la lengua oficial es distinta a la nativa de la persona que narra, conversa con personas de la zona e intenta entender la sociedad que la compone, es el día a día de estos profesionales. Sarah Morris, Íñigo Domínguez, Mathieu de Taillac y Ana Fuentes han experimentado cómo el idioma refleja alguno de los choques culturales más comunes entre países.
Las lenguas evolucionan constantemente; pero también lo hace el uso que hacemos de ellas, la elección del segundo idioma que queremos aprender y el marco en el que lo hacemos. Los motivos sociales, políticos y económicos que llevan a una persona a profundizar en otra lengua son diversos y difieren mucho en función del sistema educativo de cada estado. Sarah Morris explica que la música con letras en español ha propiciado un incremento del interés de la sociedad anglosajona en aprender este idioma frente a otros. Sam Gratton enseña a empresarios españoles a mejorar su inglés para los negocios haciendo hincapié en las diferencias culturales. Con el "humor británico" característico, como apunta Íñigo Domínguez, Sam Gratton explica brevemente los detalles que diferencian a una sociedad de otra y que se acaban percibiendo en la forma en la que nos comunicamos.
Hay rutinas que se convierten en tradición del lugar en el que suceden pero que ante los ojos de una persona extranjera son incompresibles. Eso ocurre, por ejemplo, con las colas de supermercado o con el modo en el que gestionamos el ocio. Uno de los vídeos que ha publicado el director de Gratton Communication muestra las diferencias entre ingleses y españoles a la hora de beber alcohol. "Los ingleses bebemos muy rápido porque estamos bajo la presión de beber porque los pub cierran a las 11 de la noche y ese es casi el momento en el que los españoles están saliendo de sus casas", comenta Gratton. A simple vista podría parecer que no existe una relación directa con el mundo empresarial, pero es importante conocer estás dinámicas para saber cómo enfocar los negocios.
La comunicación entre personas que no hablan un mismo idioma en ocasiones puede plantearse como una barrera, pero Sam Gratton recuerda que "para el 80% de las personas que están haciendo negocios el inglés no es su idioma nativo y prefieren escuchar a personas para las que tampoco lo es". Esto significa que la confianza se tiene que plantear como un punto esencial en la enseñanza del idioma porque "los alumnos españoles tienen mucha vergüenza de hablar tanto en inglés como en público", añade Gratton.
Los corresponsales comparten esa idea de pudor del español a la hora de hablar en inglés y de enfrentarse a hacerlo en público. Las diferencias culturales, una vez más, influyen la forma en la que nos comunicamos. "Para los españoles hablar en público es un reto porque no están familiarizados con ese proceso y, cuando no estamos acostumbrados a algo, nos da ansiedad", explica Gratton. El profesor de inglés para negocios comenta que "en Inglaterra hablar en público es algo normal ya que los niños en la escuela hacen ejercicios de enseñar y explicar ante sus compañeros de clase".
La vergüenza ajena del español al escuchar a otro español hablar inglés también es una de las reacciones que los corresponsables, y Sam Gratton, destacan. El famoso discurso de Ana Botella es uno de los que utiliza como ejemplo en sus clases. Sin embargo, una de las diferencias más importantes es la velocidad, aunque, según Gratton, tiene una justificación: "los españoles hablan entre un 30 y un 40% más rápido que los ingleses porque hay un 30 o un 40% más de sílabas".