"¡Si te toca la de Ramos te la cambio!": los jugadores del Quintanar sortean las camisetas regaladas por el Sevilla tras el partido de Copa
El equipo castellanomanchego recibió las camisetas de partido de todos los jugadores del Sevilla
El fútbol de la Copa del Rey mola. Eso es lo que dice el eslogan de la competición, "La Copa mola", y así lo demuestran los momentos que nos regala el deporte en este formato que reune a los equipos punteros de la Primera División con el fútbol más humilde de las categorías inferiores. Ayer, una de estas combinaciones se dió en el Quintanar de la Orden - Sevilla, que se llevaron los andaluces por 0-3. Sin embargo, como suele ocurrir en estos partidos, el resultado fue lo de menos y lo importante fueron los gestos.
Más información
Tras el encuentro, Oliver Torres se acercó al vestuario del Quintanar para repartir un taco de camisetas con todos los dorsales de los jugadores del Sevilla. "No os preocupéis sino tenéis todos", comentaba en el vestuario uno de los jugadores al repartir las camisetas, "Oliver Torres me ha dicho que si faltan les avisemos".
En un vídeo compartido por la Federación de fútbol de Castilla la Mancha, se puede ver como los jugadores del Quintanar, uno a uno, van metiendo la mano en una bolsa para extraer papeles con los dorsales de los jugadores del Sevilla. Las camisetas de Ramos o Rakitic, como se podía esperar, eran algunas de las más deseadas, y los jugadores celebraron al descubrir el número 4 o el 10 en sus papeles. Independientemente de la camiseta elegida, todos quedaron contentos con su regalo y la lucieron orgullosos, incluso vistiéndolas en el mismo momento.
En lo estrictamente deportivo, el Sevilla hizo los deberes y solventó el partido con goles de Rafa Mir y En-Nesiry en la primera mita y Pedrosa ya en el tiempo de descuento. En los primeros minutos, Mir remató de cabeza un centro lateral imponiéndose al defensa, mientras que el marroquí lo hizo aprovechando un rechace en una contra con gran superioridad numérica del Sevilla. El Quintanar aún pudo acercarse a puerta y Nayland evitó el gol local, arrancando algunos gritos de la grada en una bonita tarde de fútbol.