La respuesta de Einstein a los extremistas sionistas: "No estoy dispuesto a ver a nadie asociado con esa gente criminal"
Repasamos historias del conflicto palestino-israelí como la carta del científico en 1948 o la de la Declaración Balfour
Cartagrafías | Especial Palestina
Nacional
Mientras continúan sonando las bombas israelíes y muriendo civiles inocentes en Gaza dentro de una escalada de violencia que comenzó el 7 de octubre tras el atentado de Hamás a Israel en un festival de música, nosotros nos hemos propuesto con el conflicto palestino-israelí desde un ángulo totalmente distinto: poniendo las cartas sobre la mesa, dejando que las cartas hablen por nosotros.
Primero, ponemos el foco en documentos históricos, en las cartas y diarios que se conservan en la Biblioteca Nacional de Israel del escritor austriaco-judío Theodor Jerz, considerado el padre e impulsor del sionismo que consideraba que, los judíos, después de ser expulsados y atacados en distintos territorios a lo largo de la historia, debían tener un estado propio en la zona de Palestina porque era la tierra prometida por Dios en el Antiguo Testamento. Plasmó sus teorías en un libro y en 1898, se embarcó en un viaje por distintas localizaciones de Oriente Próximo para conseguir apoyos. Fue enviando regularmente cartas a su familia. Ya habían comenzado a llegar a la zona los primeros inmigrantes judíos en busca de refugio.
La polémica carta británica que dio pie a la creación del Estado de Israel
El sionismo iba a contar con un aliado fundamental para su causa: los británicos que ya presuponían que se quedarían con el territorio tras la Primera Guerra Mundial. En 1917, el ministro de Exteriores Británico, Arthur Balfour, envió una carta a un rico banquero de Londres, el varón lord Walter Rothschild, destacado líder de la comunidad judía, muy excéntrico, que para los sionistas supuso la confirmación del apoyo de una superpotencia a la creación de un estado judío en Palestina. Literalmente marcó un antes y un después en la historia. Se calcula que a raíz de esta misiva, conocida como Declaración de Balfour, y el auge del sionismo, cien mil inmigrantes judíos llegaron hasta allí.
Efectivamente, las tropas británicas conseguirían terminar con cuatro siglos de control otomano en Palestina, asumirían el control del territorio tras la guerra, y en 1948 cederían el testigo a Israel. En 2017, con motivo del centenario de esta carta, se celebró un encuentro entre autoridades de Israel, Reino Unido, y los descendientes de los implicados en el texto. El sobrino bisnieto de Balfour contó que conserva una copia de la carta encima de la chimenea de su casa. Aseguró que su familia lamenta la interpretación que se le ha dado a la carta y la situación en Palestina.
Cuando tuvo lugar este encuentro, los dirigentes palestinos protestaron y reclamaron a Reino Unido que pidiera perdón por esta correspondencia ya que fue fundamental para iniciar los procesos de proclamación del estado de Israel en la zona. Desde el principio, cristianos y musulmanes locales de Palestina, que constituían gran parte de la población, rechazaron la carta, tal y como reflejan textos firmado por 100 notables de la comunidad musulmana-cristiana que comenzaron a sentirse amenazados ante las pretensiones judías. Cuando las palabras no fueron suficientes, estalló el conflicto.
El resto de la trágica historia la conocemos: ante estas tensiones en la zona y la diáspora judía de la Segunda Guerra Mundial, la ONU aprobó un plan para la participación de Palestina. El establecimiento del estado de Israel, en 1948, dio lugar al desplazamiento de millones de palestinos y a décadas de conflicto con miles de víctimas inocentes, tanto israelíes como palestinas. En las cartas leemos todas sus fases y destaca una carta que manda Albert Einstein en abril de ese año a un líder sionista en Estados Unidos que buscaba su apoyo, Shepard Rifkin, tal y como recoge "Letters of note". La envió en abril de 1948 tras conocer que grupos paramilitares sionistas habían asesinado a más de un centenar de civiles árabes palestinos en una aldea de Jerusalén, Deir Yassin, incluyendo mujeres y niños. La masacre fue condenada por parte de la comunidad judía y por figuras como Einstein que, aunque había defendido públicamente la creación de una patria judía, no quería ser parte de ningún genocidio.
Estimado señor:
Cuando una catástrofe real y final nos sobrevenga en Palestina, los primeros responsables serían los británicos y los segundos responsables las organizaciones terroristas formadas a partir de nuestras propias filas.
No estoy dispuesto a ver a nadie asociado con esa gente criminal y engañada.
Sinceramente tuyo,
Albert Einstein
Hay historias de correspondencia sobre este tema muy sorprendentes. En 2018, se dio a conocer en todo el mundo que diez toneladas de envíos postales habían tardado ocho años en llegar a su destino, Palestina. Se acumulaban en las dependencias de Correos de Jericó porque Israel bloqueaba los envíos por razones de seguridad. Los desbloquearon tras un acuerdo con la Autoridad Palestina. Otra historia curiosa: todos los años miles de personas de todo el mundo y de diversas religiones mandan cartas a Dios, la dirección que escriben es la de la oficina de Correos de Israel en Jerusalén que tienen un departamento específico para gestionarlas... muchas terminaran en las rendijas del Muro de los Lamentos.
Seguramente, en más de una de estas cartas, se pida a Dios una solución pacífica a esta guerra. Organizaciones humanitarias también han llevado a cabo iniciativas epistolares, para dar voz a los civiles, muy importantes. La agencia de la ONU para refugiados palestinos, recopiló en el proyecto "cartas a Palestina", misivas de refugiados palestinos en España y UNICEF también hizo públicas las cartas de dos adolescentes, uno de Israel y una niña de Palestina, que resumen muy bien el sentir de ambos pueblos:
'No te voy a decir que los soldados israelíes sean buenos, porque no lo son, pero hay una razón para la preocupación. La razón son los terroristas palestinos, que vienen a nuestras casas, a nuestras calles, igual que el Ejército israelí va a las vuestras. No hay nada justo en una guerra, así que no hables de humanidad, porque no hay ninguna a nuestro alrededor. Si veo a Arafat en la tele diciendo que han muerto nueve palestinos, no puedo evitar enfadarme y gritar ¡Anoche mataron a 30 israelíes! ¿Eso es humanidad? ¿Ésa es la humanidad palestina? Tu tienes soldados, pero yo tengo terroristas', escribe el niño israelí.
La guerra de cartas entre Nick Cave y Brian Eno a raíz del bloque cultural a Israel
A lo largo de los años Laura, este asunto también ha dado lugar a una “guerra” de cartas, a cruces de cartas públicas de personalidades con opiniones enfrentadas. Uno de los intercambios epistolares más sonados ocurrió entre el músico británico Brian Eno, a favor de la causa palestina, y Nick Cave. Eno forma parte de un movimiento que promueve el boicot cultural a Israel...y le pidió a Nick, como había hecho con otros artistas, que suspendiera sus conciertos en Israel.. Él se negó y decidió publicar la carta que había enviado a Eno, músico al que admira profundamente.
Están circulando por la red muchísimas cartas de colectivos en apoyo a Israel o a Palestina, celebridades de Hollywood han denunciado la presión que sienten para manifestarse rápidamente porque lo de posicionarse abiertamente puede salir caro: en Harvard se ha liado una muy gorda porque 30 organizaciones estudiantiles firmaron una carta de apoyo a Palestina que según sus detractores no condenaban con la suficiente contundencia el atentado de Hamás. Los datos personales de los firmantes, que querían permanecer anónimos, se filtraron, y tanto ellos como sus familias, han recibido amenazas. Un millonario israelí ha anunciado que deja de apoyar a la universidad por las opiniones de estos estudiantes. Aquí en España, Serrat ha tenido que desmentir una carta que circulaba por Internet, supuestamente de su autoría, dirigida a los palestinos...Cuidado con las cartas falsas, también hay una de Mandela que no firmó él, es una recreación de un periodista holandés.
Ahora mismo, no tenemos información sobre cómo funciona el servicio postal en la Franja de Gaza, en otros momentos se ha cortado el servicio, pero diversos ciudadanos han ido mandando cartas digitales -cuando tienen conexión- para relatar lo que viven dentro. En el futuro estarán en los libros de historia para dar cuenta de esta tragedia. La revista "Protean" las está recopilando en su web.
Empezamos y terminamos con música: con una canción de Jorge Drexler, hijo de un refugiado judío alemán y de madre cristiana, que aborda el conflicto palestino-israelí.
Laura Piñero
Cartagena (1985) Periodista de la SER desde 2009....