La española elegida como una de las mejores profesoras del mundo: "Sentir el cariño de tus alumnos es lo más bonito que te puede pasar"

Este fin de semana se entregan en Nueva Delhi los Global Award Teacher que reconocen a aquellos profesores que "demuestran excelencia en la enseñanza, contribuyen de forma destacada al desarrollo de sus alumnos y sirven a sus comunidades mediante la educación, dentro y fuera de las aulas formales, contribuyendo a crear una sociedad mejor a través de una enseñanza inspiradora".

En total se han presentado 19.000 candidaturas de casi un centenar de países y entre los 500 docentes premiados figura Lourdes Zoraida, una maestra del colegio público 'Mare Nostrum' de Torrox que esta tarde se ha asomado a La Ventana para hablar de educación "en positivo", como le gusta recalcar.

"Estoy cansada de ver casi siempre noticias negativas sobre la enseñanza, cuando se están haciendo un montón de cosas positivas. ¿Cuándo vamos a dar a la educación el papel que se merece en nuestra sociedad?", se pregunta esta maestra de primaria vocacional que lleva dieciocho años dando clase. 'Mis padres, ya jubilados, eran maestros y yo desde pequeña tenía claro que quería ser como ellos.

La pasión con la que Lourdes habla de su trabajo lo traslada a todo lo que hace siempre con una visión global. "Nosotros somos una comunidad educativa y eso significa que todos podemos y debemos aportar. A la educación contribuimos los profesores pero también el vecindario, las asociaciones del pueblo, los clubes deportivos, el personal de limpieza y cocina del colegio, todos". En esa idea de un aprendizaje dentro y fuera de las aulas, Zoraida ha puesto en marcha un programa de radio mensual en colaboración con la emisora municipal en Torrox y no duda en involucrar a padres y madres como voluntarios en talleres grupales de aprendizaje en clase mediante juegos de mesa.

"Esto es un trabajo en equipo y que las familias y los docentes estemos del mismo lado es muy importante". El premio le ha llegado casi por sorpresa. "Yo había quedado finalista en los premios Educa Abanca en los que te nominan las familias. Como ya tenía reunida toda la documentación y el currículum, me hablaron de estos premios y decidí optar también, casi como la lotería", explica entre risas. Antes, tuvo que lograr que cinco compañeros apoyasen su nominación. Algo que sus colegas que firmaron de inmediato. La sorpresa, y también una inmensa alegría, llegó cuando semanas después una carta en inglés le notificaba el premio.

"Es una gran satisfacción pero mucho mejor que cualquier premio es sentir el cariño de tus alumnos o que los que un día fueron tus niños y que ahora ya están en la Universidad o trabajando sigan visitándote y te recuerden".

Javier López, el joven empresario de 21 años que vende aceite para restaurar la fachada de la escuela donde estudió

La gratitud y el cariño que genera la enseñanza es bidireccional. Y un buen ejemplo es el de Javier López, un joven empresario de 21 años de la localidad jienense de Villanueva del Arzobispo que ha decidido apoyar al colegio en el que estudió de una forma singular. López es el gerente de la Los Albacares y también se ha asomado a La Ventana para contarnos su particular manera de agradecer al centro en el que estudió 'Fundación Safa', todo lo que ha hecho por él.

"Hace poco me enteré de que el colegio necesitaba dinero para reparar la fachada pero no tenían fondos. Así que empecé a pensar en cómo podía ayudar y se me ocurrió lanzar una edición limitada de aceite de oliva para recaudar dinero. De momento llevo vendidas 500 botellas a un precio de doce euros". Todo lo que recaude irá para la escuela en la que López estudió un grado medio de Mecánica y del que salió con la formación y con las ganas de seguir trabajando en el oficio familiar del olivar.