Así será la investidura de Pedro Sánchez: orden de intervenciones y cuándo se vota
El candidato socialista tiene garantizados los apoyos para ser reelegido presidente en la primera votación
Pedro Sánchez sube a la tribuna de oradores del Congreso. / Europa Press
Pedro Sánchez se enfrenta entre este miércoles y el jueves a una sesión de investidura en el Congreso que, si transcurre según los pronósticos, le garantizará su reelección como presidente del Gobierno. Lo hará gracias al voto favorable de los diputados socialistas, sumados a los de Sumar, Junts, ERC, PNV, EH Bildu, BNG y Coalición Canaria. En total, 179 apoyos, tres más de los necesarios para una mayoría absoluta.
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Al igual que ocurrió con Feijóo, la investidura se dividirá en dos sesiones. En la primera jornada, que arrancará el miércoles a las 12:00 (horario peninsular español), comenzará el debate; es decir, será el momento en que los portavoces de los grupos parlamentarios ofrecerán sus argumentos a favor y en contra del candidato. En la segunda jornada, intervendrán los grupos que no tengan tiempo de hacerlo el miércoles y se celebrará la votación. Si, como se espera, Sánchez obtiene mayoría absoluta, saldrá investido presidente. En caso contrario, tendrá una nueva oportunidad 48 horas más tarde y, esta vez, sólo necesitará más síes que noes.
Cómo será el pleno en el Congreso
Tal y como marca el artículo 171 de la Constitución, Sánchez será el primero en intervenir, con un discurso en el que expondrá, sin límite de tiempo, el programa político del Gobierno que pretende formar y solicitará la confianza de la Cámara. Tras un tiempo de interrupción fijado por la presidenta del Congreso, Francina Armengol, intervendrán el resto de grupos parlamentarios, de mayor a menor peso en el hemiciclo. El PSOE volverá a tener la palabra para cerrar el debate. Por este orden, subirán a la tribuna los representantes de los siguientes partidos:
- PP
- Vox
- Sumar
- ERC
- Junts
- EH Bildu
- EAJ-PNV
- Grupo Mixto
- PSOE
Los grupos dispondrán de 30 minutos para valorar la candidatura de Sánchez. Tanto el candidato como cualquier miembro del Gobierno en funciones podrán hacer uso de la palabra para responder a los grupos cuantas veces quieran. Estos tendrán un turno de réplica de 10 minutos.
De esta manera, tras el discurso inicial de Sánchez, se producirá su primer enfrentamiento con el líder de la oposición, Alberto Núñez Feijóo, puesto que en el intento fallido del candidato popular el encargado de intervenir por parte de la bancada socialista fue Óscar Puente. Ahora será Feijóo quien responda a Sánchez; y lo hará con la oposición a la ley de amnistía como principal ariete.
Respecto al resto de los grupos, cabe esperar que no todos intervengan el miércoles. Los que falten, lo harán el jueves. La sesión se reanudará sobre las 9:00, con la misma dinámica de intervenciones y réplicas que el día anterior. Una vez que todos los grupos hayan participado, se celebrará la votación. A modo orientativo, en el caso de Feijóo tuvo lugar a las 12:55 y acabó sobre las 13:22.
Para ser investido, Sánchez necesitará una mayoría absoluta del Congreso. Sea cual sea el resultado, Armengol se trasladará al Palacio de la Zarzuela para comunicar al Rey el resultado. Si, como está previsto, Sánchez resulta investido presidente, se espera que jure su cargo ante Felipe VI en La Zarzuela al día siguiente, el 17 de noviembre, mismo día en que su nombramiento se publicará en el Boletín Oficial del Estado (BOE). A juzgar por el precedente de su primer mandato, se espera que forme Gobierno a principios de la semana que viene, en torno al 21 o el 22 de noviembre.
¿Qué pasaría si Sánchez fracasa?
Si saltara la sorpresa y Sánchez no consiguiera los apoyos necesarios, tendría una nueva oportunidad 48 horas después; esto es, el sábado, 18 de noviembre, a la misma hora de la hipotética votación fracasada. En esta ocasión, al candidato le bastaría una mayoría simple; es decir, más síes que noes.
En caso de que Sánchez tampoco obtuviera los apoyos necesarios en la segunda votación, la única alternativa que quedaría es la repetición de las elecciones generales. El reloj electoral comenzó a correr el 27 de septiembre, fecha del primer intento de investidura de Feijóo. Si para el 27 de noviembre (dos meses después de aquella fecha), no hubiera otro candidato con los suficientes votos a favor, las Cortes se disolverían y se celebrarían elecciones 47 días después. Por tanto, la fecha de los nuevos comicios sería el 14 de enero.
