"Lo único que pensaba era: 'Espero que los míos de hoy no tengan agujeros'...": la curiosa anécdota de los calzoncillos de Fede Valverde en su llegada al Castilla
El jugador uruguayo relata cómo se sintió al llegar al vestuario del Real Madrid Castilla en su entrevista con 'The Players Tribune'
El Real Madrid se hizo con los servicios de un jovencísimo Federico Valverde, por aquel entonces, estrella de la selección uruguaya sub-17, en el año 2015. Un jovencísimo 'Fede' se mudó a Madrid con sus padres en cuanto cumplió 18 años y empezó a jugar con el Real Madrid Castilla en 2016. El uruguayo llegaba desde su país natal, tras una infancia y una adolescencia muy humildes porque su familia no tenía recursos. Ahora, en sus palabras para 'The Players Tribune', relata como fue su llegada al primer entrenamiento con el filial del club blanco.
"Te puedo contar el momento exacto cuando me di cuenta de lo boludo que era yo", relata el futbolista uruguayo. Valverde había sido llamado por los agentes del Real Madrid cuando estaba concentrado con la selección sub-17 de Uruguay. "Tenés 17 años. Un par de años atrás, dormías en una cama en el suelo, ¿¡y ahora estás por firmar para el Real Madrid!?", explica el fubolista sobre el momento que estaba viviendo en esa corta edad. Sin embargo, no tardó mucho en "sonarle la alarma".
"En mi primer entrenamiento con el Castilla, entré al vestuario sintiéndome como si caminara en las nubes", cuenta Valverde. Asegura que no recuerda el entrenamiento como tal, que "está borroso" pero que recuerda perfectamente como se sintió al terminarlo y volver: "... hasta que me empecé a fijar en la ropa que estaban usando". Sus compañeros vestían "cinturones Gucci, zapatos Nike nuevos sin un rasguño, billeteras Louis Vuitton" y hasta "calzoncillos Gucci". Para el jovencísimo Valverde, fue todo un shock comprobar que sus compañeros, que no eran leyendas del Real Madrid precisamente, llevaran "relojes más caros que la casa de mis padres".
"La puta madre, Fede, estás usando una remera de dos euros", se decía a sí mismo el uruguayo. "Así que estoy ahí sentando, con la ropa sucia y no me quiero sacar ni los zapatos". Valverde asegura que se quedó mirando algo en el teléfono hasta que todos los compañeros se fueron, porque temía que sus calzoncillos tuvieran algún agujero: "Le pido a Dios que mi mamá los haya controlado cuando los lavó".
"Nunca me sentí tan chiquito. Esa misma noche, fui al H&M y dije: “Necesito 10 paquetes de los mejores calzoncillos”.
Manu Carreño: "No sé si sabremos qué se dijeron, pero sí sabemos que Fede Valverde pegó a Alex Baena y eso es injustificable"