El expresidente del Gobierno Mariano Rajoy ha sacado pecho del artículo 155 de la Constitución en Cataluña que aplicó su Ejecutivo y ha arremetido contra el socialista Pedro Sánchez por ir «contra la Constitución y contra la ley». Dicho esto, ha llamado a la «resistencia cívica» frente al «proyecto de mutación constitucional» que pretenden el PSOE y sus socios, dado que, en su opinión, están ante la legislatura «más decisiva» de las últimas décadas. En la presentación del desayuno del presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, organizado por el foro Nueva Economía, Rajoy ha recalcado que hay que «seguir defendiendo la necesaria igualdad de los españoles» ante «tanto ruido y tanta falsedad» de Sánchez y los independentistas. Rajoy ha subrayado que un Gobierno y una mayoría parlamentaria «no pueden ir contra la ley ni contra la Constitución» y ha subrayado que «eso es lo que está en juego en esta legislatura» después de que los socios de Sánchez hayan «dejado explícito su chantaje»: amnistía y autodeterminación. «Todos sabemos que ninguna de las dos cabe en la Constitución, hasta tal punto que han hecho una ley de amnistía que en su exposición de motivos se dedica a explicar por qué la ley es constitucional. Nunca había visto yo esa suerte de técnica jurídica», ha exclamado. Rajoy ha recordado que cuando estaba en Moncloa tuvo que tomar decisiones «relacionadas» con lo que hoy están viviendo, tras la declaración unilateral de independencia en 2017, y ha subrayado que sus decisiones «fueron distintas e incompatibles con lo que está sucediendo hoy en España». «No estoy de acuerdo en nada», ha proclamado. En este sentido, ha señalado que él aplicó el 155 y defendió la ley y la Constitución, con decisiones que «tuvieron el apoyo del Poder Judicial y de la inmensa mayoría de los ciudadanos». «Aplicar el artículo 155 sirvió para defender la Constitución y la ley. Lo que se está haciendo ahora va en la dirección contraria, va contra la Constitución y contra la ley», ha proclamado, para avisar que Sánchez ha «generad la mayor etapa de polarización y división» que él ha visto a lo largo de su vida. «El artículo 155 supuso un mensaje nítido y claro, y es que la democracia española tiene instrumentos para defenderlo y cuando se le ataca, si hay un Gobierno serio al frente, se defiende», ha dicho, para añadir que ahora el mensaje que se ha dado es «dar alas a quienes pretenden liquidar» el texto constitucional. Rajoy ha asegurado que se ha dicho que estos años se ha producido «una pacificación gracias al inicio de una etapa de diálogo» y ha rechazado esa manifestación del Gobierno de Sánchez porque, a su juicio, «la pacificación consiste en aplicar la ley». «La pacificación consiste en aplicar la ley y cuando se aplica la ley, cuando se puso en marcha el 155, nadie volvió a intentar liquidar la Constitución y la ley porque sabían exactamente que había un instrumento que los podía poner, como se hizo en su día, en su sitio», ha declarado. Rajoy ha reconocido que están ante la legislatura «complicadísima» en la que la economía «se está parando» y llevan «mucho tiempo sin hacer reformas», con «serios problemas de desajustes en el mercado de trabajo y crecientes desequilibrios económicos». «Pero por encima de todo esta es la legislación más decisiva de las últimas décadas porque se van a poner a prueba la fortaleza y la dependencia de nuestras instituciones, el coraje de la sociedad civil y la responsabilidad de todos. Estamos ante una legislatura decisiva para el futuro de nuestra comunidad y para la vigencia de nuestro texto constitucional», ha aseverado. Tras asegurar que a Sánchez le toca gobernar para el conjunto de la sociedad, y no para su mayoría parlamentaria, ha indicado que «convendría una rectificación y no hacer más daño del que se está haciendo en estos momentos». Es más, ha señalado que un gobernante «no debe engañar» ni hacer de forma «sistemática» lo contrario de lo que prometió a sus votantes, ni tampoco debe «levantar muros entre españoles». Así, ha dicho que la «principal propuesta que se le ha hecho a la sociedad» en el debate de investidura «es levantar un muro contra al menos 11 millones de españoles», abriendo «la mayor etapa de división y polarización de la reciente historia de España». Rajoy ha señalado que en España hay libertad de expresión «hasta para las mentiras más grotescas» pero ha alertado de que «lo peor de esa mentira es que busca justificar un plan deliberado para socavar la independencia de la justicia en España». «Esto es lo que negro sobre blanco se plasma en los acuerdos políticos que han permitido la investidura. Esos acuerdos son una descalificación intelectual y moral de la democracia española», ha avisado. Tras asegurar que será en Bruselas donde se haga el control al Gobierno de Sánchez y «donde se le ponga fin», ha indicado que «lo que define el arranque de esta legislatura es la protesta masiva e inédita en democracia de los jueces españoles por unos acuerdos políticos que liquidan la separación de poderes y el principio del imperio de la ley». «Eso y las propuestas multitudinarias y pacíficas de cientos de miles de ciudadanos que han dicho que no quieren que les cambien por la puerta de atrás su modelo de convivencia y también la reacción de todo el mundo de las asociaciones de todo tipo de personas a título individual de ideologías diferentes algo que nunca hemos visto en democracia desde que ésta volvió a España a finales de los años 70», ha destacado. De hecho, Rajoy ha destacado que este sábado se verá en la calle otro testimonio de «ese coraje democrático», en alusión a la protesta de la sociedad civil en Cibeles y ha resaltado que en España hay «talento, energía e inteligencia suficientes» para «para resistir ese proyecto de mutación del pacto constitucional». «Creo que tenemos instituciones sólidas y ciudadanos comprometidos con su democracia», ha aseverado, para añadir que gente «de todo tipo» ha expresado su «oposición total» y su «indignación», «muy justificada», ante lo que está sucediendo en España. Dicho esto, el expresidente del Gobierno ha indicado que el PP que lidera Alberto Núñez Feijóo --presente en este foro-- es el «mejor instrumento para dar la respuesta política a esta situación y para liderar la resistencia cívica al desafío planteado». A su juicio, el presidente del PP es la persona «más preparada, intelectual, política y social y moralmente para tirar abajo ese muro de sectarismo que algunos empeñan en construir». «Frente a una mayoría parlamentaria que es un sindicato deslavazado de intereses contradictorios, el Partido Popular ofrece el mismo compromiso con la Constitución y el bienestar en todos los rincones de España», ha manifestado. Finalmente, ha dicho estar «muy honrado» de presentar la conferencia de Alfonso Rueda, al que ha retratado como una persona de «fiar» y un político «moderado, sensato y equilibrado», «cualidades muy importantes en un gobernante» y que hoy son «poco abundantes».