España forzó la salida de dos espías de EEUU por infiltrarse en el CNI y sobornar a un agente veterano para acceder a información clasificada
Margarita Robles asegura que el incidente no va a afectar al "núcleo fundamental de las relaciones" entre ambos países
"Una crisis diplomática está latente detrás de este acto hostil": Miguel González, periodista de El País, sobre la expulsión de dos espías de EEUU de España
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Madrid
España y EEUU son países aliados y comparten información, pero eso no ha impedido que al menos dos agentes de la inteligencia americana hayan intentado infiltrarse en el CNI con el soborno como modus operandi. Un caso inédito que, según publica El País, ha acabado con una reunión entre la ministra de Defensa, Margarita Robles, y la embajadora de EEUU en España, Julissa Reynoso, con la detención de dos agentes del CNI y con la expulsión discreta de dos espías norteamericanos.
El CNI, que depende del Ministerio de Defensa, detectó antes del verano que un jefe de área —mando intermedio— había accedido a información clasificada que no estaba relacionada con su ámbito de actuación y para la que no contaba con autorización.
Según ha detallado en Hoy por hoy el periodista Miguel González, autor de la información en El País, de no tratarse de dos países aliados, una operación tan hostil como esta —propia de países enemigos— habría desencadenado una crisis diplomática.
Disculpas de EEUU
Según El País, cuando el CNI dio por concluida su investigación, la directora del servicio secreto, Esperanza Casteleiro, denunció los hechos ante la Fiscalía de la Audiencia Nacional, que a su vez trasladó el caso a la Fiscalía del Tribunal Superior de Justicia de Madrid, quien acabó presentando una denuncia ante el juez de guardia de los juzgados de instrucción de la plaza de Castilla. Fue entonces cuando el Gobierno comunicó los hechos a EEUU, trasladándole su protesta.
González ha detallado en Hoy por hoy que la embajadora Reynoso se disculpó y aseguró no estar al corriente de los hechos por tratarse de una operación independiente de la Embajada que, además, se había iniciado antes del inicio del mandato de Joe Biden.
La ministra de Defensa, Margarita Robles, ha asegurado que el incidente no va a afectar al "núcleo fundamental de las relaciones" entre España y EEUU, recalcando que son aliados y amigos. "Surgió como consecuencia del propio trabajo que realiza el CNI, que detectó unas conductas irregulares que podían ser constitutivas de delito", ha dicho.
Entre seis y doce años de cárcel
La información publicada por El País detalla que los ministerios de Defensa y Exteriores acordaron la expulsión de al menos dos espías estadounidenses y que esta se hizo de manera discreta.
Por su parte, el juzgado de instrucción número 22 de Madrid declaró secretas las diligencias y ordenó la detención de los dos espías denunciados. Ambos ingresaron en la prisión de Estremera (Madrid), pero el ayudante fue puesto el mes pasado en libertad con cargos.
El caso ha causado consternación en el CNI porque uno de los agentes implicados es muy veterano. Tanto él como su subordinado están acusados de un delito de revelación de secretos y podrían ser condenados a una pena de entre seis y doce años de cárcel.