Antoine Griezmann iguala a la leyenda Luis Aragonés como máximo goleador de la historia del Atlético de Madrid
El francés suma 173 dianas con las dos ante el Getafe, además de 77 asistencias en 364 partidos con el club rojiblanco
Antoine Griezmann ya es historia del Atlético de Madrid. El francés ha anotado dos goles esta noche de martes, en el partido ante el Getafe en el Metropolitano. Con ellos, suma un total de 173 dianas con el club rojiblanco y ya iguala al hombre récord y hasta ahora máximo goleador del equipo: Luis Aragonés.
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Griezmann ha conseguido la gesta en un partido que parecía complicarse por momentos para el Atlético de Madrid. Precisamente 'el Principito' abría la lata, revisión por fuera de juego mediante, rematando de media volea un balón colgado. Lo hacía en el minuto 44, al borde del descanso y cuando los del Cholo ya contaban con un jugador menos: Savic había sido expulsado tras una mala entrada en el minuto 38. En el segundo tiempo, sin embargo, Oblak dejaba un balón muerto tras atajar y el rechace lo marcaba Borja Mayoral de cabeza.
Morata aparecía al rescate en el minuto 63 para el empate y, poco después, se abría lapuerta para que Griezmann igualara el récord de Aragonés. Hermoso caía en el área y el colegiado pitaba penalti tras la revisión. Morata se lo dejaba al francés, Griezmann cogía la pelota, la colocaba con mimo, y se preparaba para hacer historia. Con el silbido, Griezmann apuntaba a la escuadra izquierda de un David Soria que llegaba a rozar el balón, pero no podía evitar el tanto. El delantero francés anotaba así su gol número 173 con el Atlético de Madrid.
El récord previo, firmado en el año 1974 por Luis Aragonés, leyenda del club que años más tarde también pasaría por los banquillos y que nos dejó en 2014, ha sido superado por un Griezmann que suma 364 partidos con la camiseta rojiblanca. Eso sí, en dos etapas, ya que Griezmann abandonó Madrid en 2019 para fichar por el Barça. En Barcelona nunca llegó a encajar, y a su vuelta al Metropolitano tuvo que ganarse el cariño de un público que recordaba su marcha.
Además, se vio condicionado por cuestiones burocráticas entre ambos equipos y que, por contrato, no le permitían jugar más de 30 minutos de un partido durante su primera temporada. Aún así, y como ha destacado Miguel Martín Talavera desde el Metropolitano: "Él forzó la máquina, se quedó jugando los 30 minutos máximo y tenía entre ceja y ceja ser el jugador con más goles de este equipo".