El City 2023/2024, con Martí Perarnau: ejes irrenunciables de Guardiola, Rodri, Haaland, cómo cubrir la baja de De Bruyne...

Tras publicar 'Dios salve a Pep, charlamos con Martí Perarnau sobre el pasado, el presente y el futuro de Guardiola

El City 2023/2024, con Martí Perarnau: ejes irrenunciables de Guardiola, Rodri, Haaland, quién podría haber suplido a De Bruyne... (Catherine Ivill/Getty Images) / Catherine Ivill

Fernando Rodríguez Rodrifez

Cadena SER20/12/2023 - 17:05 UTC

Madrid

Ya hace unas semanas que ha visto la luz el libro ‘Dios salve a Pep’, el libro de Martí Perarnau que cierra su trilogía en torno a la figura de Josep Guardiola. Martí atiende a ‘Play Fútbol’ en medio de la presentación del libro. Dice estar algo cansado, pero eso es una buena señal. “La editorial me ha explicado que las cosas van muy bien, que la segunda edición ha dudado apenas 24 horas, ya vamos por la tercera en tres semanas, con lo cual, estupendo. El libro ha tenido buena acogida”, le dice a Bruno Alemany.

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Su ‘Dios salve a Pep’ es una crónica de 700 páginas en las que hace una crónica de los años de Pep Guardiola en el Manchester City. “Sale de promedio a 100 por temporada (risas), aunque intenté por la salud del lector y la mía enfocar cada temporada de forma distinta”, bromea Martí Perarnau. Pero lo que dice es cierto. No todas las temporadas están analizadas desde el punto de vista táctico, sino que en el libro hay muchos temas personales que afectan ya no solo a Pep Guardiola, sino a muchos de los jugadores que han estado bajo la batuta del técnico catalán.

Cómo no, en el libro también se habla de títulos. Y no solo de los importantes. No solo de la Premier League o de la Champions, sino también del simbolismo de algunos trofeos que no han sido tan importantes desde el punto de vista mediático.

“La amargura de la final de la Intercontinental del 1992 está ahí. El Santos de Tele Santana venció al equipo a equipo de Cruyff. Luego, la primera final que consigue el Barça con el Guardiola ya entrenador fue esa final dramática en la que se culmina en sextete en 2009. Recodarás aquella imagen de Pep llorando tras terminar ese trabajo de Hércules. Luego vino la exhibición de 2011. Recuerdo una conversación en Múnich entre Pep, Manel Estiarte y Doménec Torrent sobre cuál había sido el mejor partido del Barça de aquella época. Estaban entre la final de la Champions frente al United en Wembley de Champions o la final de 2011 frente a Santos. Estiarte se inclinaba más por esa final del Mundial de Clubes, Pep por la final de la Champions y Doménec no sabía muy bien con cual quedarse de las dos. A los pocos meses tocó la final del Mundial de Clubes con el Bayern y Pep se alegró mucho por ganarla. No consiguió el sextete con el Bayern, los tres títulos que había ganado Heynckes no consiguió multiplicarlos por dos porque en la Supercopa de Alemania perdió contra el Dortmund de Klopp. Le gano la Supercopa de Europa al Chelsea de Mourinho y luego también el Mundial de Clubes”, rememora.

Desde el primer Mundial de Clubes de Guardiola hasta hoy han pasado 14 años. Dos más lleva el de Santpedor como técnico. Y con Martí Perarnau, repasamos su trayectoria.

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Qué no ha cambiado en el estilo de Guardiola. “Le esencia del juego de Pep Guardiola no ha cambiado. Él tiene muchos fundamentos de juego, pero hay dos que son irrenunciables: el balón y el dominio en el centro del campo. El balón es el eje de su juego. Él cree que ha de ser propiedad de su equipo y cualquier intento del contrario por robar lo considera una agresión. Hay que recuperarlo inmediatamente y, a partir de ahí, te organizas y tratas de desorganizar al contrario. Ese es su primer fundamento. El segundo es tener superioridad numérica o cualitativa en el centro del campo. Lo define como hombre de más. Durante años lo ha conseguido con el falso 9, retrasando a ese hombre que ocupa la posición de delantero centro, se llamara como se llamara. Pero ahora, con la llegada de Haaland al City, lo ha conseguido a través del movimiento contrario, adelantando un defensa. Hemos visto a John Stones, a Akanji, por descontado a los laterales… Esto es lo único que no hay cambiado, lo demás es una evolución constante”.
El trabajo de los microdetalles con los jugadores. “Guardiola le da una importancia altísima a la mejora individual. Es un gran trabajador de lo táctico y lo colectivo, pero dedica la mayor parte de las horas de lo que él llama trabajar en el campo de entrenamiento en intentar perfeccionar los microdetalles con los jugadores. Lo hemos visto con casi todos: Sterling, Rico Lewis… Hace unas semanas lo vimos con Haaland. Fue sobre el césped y discutían sobre dos remates de cabeza. Uno lo metió y el otro no. Ahí estaban discutiendo sobre qué tipo de salto dar, qué tipo de cabezazo ejecutar… E la victoria ante el Luton, el gol que encaja el City es un error de Rubén Días. Guardiola le dice que se ha comido un balón que le viene de frente. Él le dará sus argumentos, pero él le intenta corregir cómo debe despejar este balón. Ese pequeño perfeccionamiento ocupa la mayoría del tiempo de Guardiola (…) Los jugadores no evolucionan por arte de magia, lo hacen por este tipo de trabajos”.
La vuelta de tuerca del City 2023-2024. “No hay más remedio que adaptarse a nuevas realidades. Se va Gundogan, que tras siete años quiere otro reto, y no hay otro como él en el mercado. A eso añádele que se va Mahrez, que es un extremo diferente a Grealish y Bernardo, que es un regateador maravilloso. Se lesiona de gravedad Kevin De Bruyne, que es una baja de peso… Guardiola ha tenido que por un lado buscar una vuelta de tuerca con Doku y con dos conductores de balón como Kovacic y Nunes, y luego cubrir la baja de Kevin de Bruyne, que lo tienes que hacer con alguien del equipo, porque no hay un Kevin de Bruyne 2.0 en el mercado. Bueno, sí, Bellingham. Es alguien que podía cubrir ese hueco, esa función, pero ficha por el Real Madrid. Ahí aparece Julián. En los cambios hay parte de voluntad y parte de no hay más remedio”.
La evolución de Rodrigo Hernández con Guardiola. “No tiene nada que ver el Rodri que ficha el City con el de hoy. Rodri era un mediocentro prometedor, que corría muchísimo, y al que, entre otras correcciones, se le ha transmitido que necesita correr menos. Puede resultar chocante, pero Pep y Lillo son del criterio de que un mediocentro tiene que correr entre comillas ‘poco’. Tiene que correr con inteligencia, cuando toca. Cuando hay una emergencia. Pero no todo el rato, porque eso te desorganiza (…) El nivel de Rodri es un problema para el club, qué haces. Bueno, podías ir a por Declan Rice, pero vas a pagar 110 millones por un jugador que va a pelearse con Rodri por una plaza. Ahora imagina que se va Phillips. ¿A quién fichas? Es que al que fiches va a dar menos rendimiento que Rodri. Bendito problema, sí, pero no siempre tienes la posibilidad de tener un Haaland-Julián Álvarez”.
El trabajo de Guardiola con Haaland. “Guardiola nunca ha intentado cambiar la naturaleza del jugador. Haaland no es Harry Kane. En algunas cosas para mejor y el otras para peor. Creo que hay aspectos en los que Haaland es mejor que Kane, pero es que Kane también es bestial, decir que hay alguien mejor que él a veces parece una herejía… Pep con Haaland ha visto muy claro que con él hay que potenciar la naturaleza interna del jugador y añadirle detalles. Ya se ve que desde el primer Haaland hasta hoy hay cambios. Ahora desciende un poco más, da más apoyos, retiene mejor la bola, está intentando mejorar en los controles… Pero sigue siendo el mismo Haaland que llegó. Pep se esfuerza mucho en no transformarlo en un Harry Kane de la vida. Haaland es un prodigio, con mucho trabajo conseguirías que adquiriese cualidades cercanas a las de Kane, pero quizá pagarías un precio muy alto. Desnaturalizarías su principal faceta. Esa naturaleza de bestia, de que va a pasar algo cada vez que recibe cerca del área. Pep quiere potenciar eso”.
Las ‘asignaturas pendientes’ de Pep Guardiola. “Yo creo que del Barça… Ibrahimovic. No fue un fichaje menor. Fue un fichaje potente, él esperaba mucho de esa convivencia con Messi y por una multitud de razones, parte culpa de Ibra y parte culpa de Pep, fue un fichaje que no da rendimiento. En el Bayern no tengo esa sensación. Primero porque pudo fichar a pocos de lo que él quería. Bueno, pidió a Gundogan y le trajeron a Vidal. Y luego Thiago va bien, Douglas sale bien, Kimmich sale estupendo, Xabi Alonso muy bien… Ahí no tiene un Ibra. En el City… bueno, Kalvin Phillips ha salido mal, pero fue fichado como suplente de Rodri. Me quedo por descarte con Ibra”.

Sobre estos y muchos más aspectos tanto del estilo de Guardiola como del Manchester City han charlado Martí Perarnau y Bruno Alemany en el último episodio de Play Fútbol. También del futuro del técnico de Santpedor.