Isabel García se disculpa por sus polémicos comentarios y se compromete firmemente con la ley trans

Madrid

La nueva directora del Instituto de la Mujer del ministerio de Igualdad, Isabel García, se ha disculpado en su cuenta de X (antes Twitter) tras la polémica por su nombramiento en relación a unos comentarios en redes sociales acusados de tránsfobos por el principal socio del Gobierno, Sumar.

García ha lamentado si algunos de sus "comentarios personales, manifestados durante el debate previo a la tramitación de la ley trans, hubieran podido causar alguna ofensa" y ha trasladado su "total y absoluto compromiso" con la ley para la igualdad real y efectiva de las personas trans y para la garantía de los derechos de las personas LGTBI, conocida como ley trans, promulgada por el ministerio de Igualdad de Irene Montero.

A su vez, la activista ha asegurado que la ley "ha concitado el consenso político" y la apoya "firmemente". "Es una ley pionera que protege y garantiza los derechos de las personas lesbianas, gais, bisexuales, trans e intersexuales, con el objetivo de erradicar cualquier discriminación y contribuir a su desarrollo en libertad e igualdad"; ha escrito en su cuenta de X.

Además, García ha asegurado que desde su posición trabajará "para hacer una política integradora en favor de todas las mujeres y, por supuesto, de los colectivos LGTBI+ y de las personas más vulnerables" y que "como demócrata, socialista y mujer" siempre defenderá "el diálogo en un marco de respeto para poder seguir construyendo una sociedad libre e igualitaria".

El nombramiento de Isabel García por parte de la nueva ministra de Igualdad, Ana Redondo, causó un gran revuelo entre los votantes y simpatizantes de Sumar por una serie de comentarios polémicos sobre las personas trans en redes sociales.

La portavoz de Feminismo, Igualdad y Libertades LGTB+ de la coalición, Elizabeth Duval, ha acusado a García de transfobia y no ha aceptado las disculpas de la nueva directora, considerando que lo ha hecho para "aguantar el cargo" y que "sigue pensando exactamente lo mismo". "Contribuir a demonizar a las personas trans o luchar contra sus derechos no es personal, es político", ha escrito la escritora y activista de los derechos transgénero en su cuenta de X.