Martín Bianchi: "Podemos confirmar quién no irá a la fiesta de cumpleaños del rey emérito: ni su hijo Felipe, ni Mario Vargas Llosa"

Madrid

El rey emérito, Juan Carlos de Borbón, planea una gran fiesta de cumpleaños en Abu Dabi a la que están invitadas "personitas" como Fernando Almansa, ex jefe de la Casa Real, o Félix Sanz Roldán, ex jefe del CNI, ("imagínate toda esa gente bondadosa allí", dice Martín bianchi en Hoy por Hoy). Posiblemente esta fiesta sea amenizada por la campechana música de Los del Río.

Bianchi no tiene claro si cuando el rey emérito invita quiere decir que paga los billetes y los hoteles de sus invitados, pero sí puede confirmar la ausencia de algunas personas que recibieron la invitación pero la declinan, como el escritor Mario Vargas Llosa, que pasa estos días en Lima con su exmujer, Patricia, y su familia.

Y cuando decimos "invitados", ¿significa que el emérito lo paga todo? ¿Desplazamientos y estancias incluidas? "Es de mal gusto tener que pagar", dice Martín. "Normalmente te ponen un jet privado, te invitan al hotel... Pero el rey emérito está acostumbrado a no pagar nada, entonces no sé si los va a invitar y tal vez por eso mucha gente esté diciendo que no puede ir." Y es que la vida de rico es no tener que preguntar cuánto cuesta algo. Y los muy, muy ricos, además, nunca pagan nada. "Esa es la paradoja: los ricos tienen mucho dinero y no lo gastan porque les invitan a todo. Y el rey Juan Carlos es uno de ellos. Recordemos que tiene un primo, Orleans, que le pagaba todos los vuelos".

La única mujer que quedaba

Pero si hay un royal que ha sido noticia esta semana, esa es la reina Margarita de Dinamarca, que anunció su abdicación en su discurso de fin de año. Y la primera persona en la que pensamos en el Hoy por Hoy en cuanto lo supimos fue en Martín Bianchi. Él, a su vez, pensó en Genoveva Casanova. El escándalo que la relaciona con el heredero de la corona, Federico, no tiene, por lo visto, nada en absoluto que ver con la decisión de la reina, que llevaba planificando muchos meses, pero no deja de ser curioso que "un reinado de 52 años de historia acabe con el Genovevagate".

Ampliar

A Martín la noticia le sorprendió porque "ella siempre dijo que no iba a abdicar, la abdicación no es una tradición en Dinamarca, así que no deja de llamar la atención que haya cambiado de opinión, más allá de que tenga 82 años y sufra problemas de espalda." Porque, a pesar de ser una fumadora empedernida (hasta 2006 fumaba en público, hasta en recepciones oficiales y con la tiara puesta), no se le conocen mayores problemas de salud. "Es bastante popular Margarita porque es bastante honesta y directa" y si fumaba en público era "por no ser hipócrita".

Únete al canal de WhatsApp de la SER

La única mujer que quedaba al frente de una monarquía europea se ciñó la corona gracias a un referéndum, por el que el pueblo danés abolió la ley sálica con más del 85% de los votos. De no haber triunfado esa votación hubiera reinado un hermano de su padre y Dinamarca habría tenido al rey Canuto. Martín cuenta que la reina no se aburrirá una vez jubilada: se educó en Inglaterra, estudió sociología y arqueología, pinta y expone, escribe cuentos, diseña vestuario para teatro, traduce libros y los ilustra (la edición danesa de El señor de los anillos está traducida e ilustrada por la reina).

"El príncipe Turbo"

Federico, que será Federico X, es conocido como "el príncipe Turbo", no por los bañadores escuetos, sino porque le gustaban los coches, las motos y la velocidad. De hecho, de muy joven fue detenido por exceso de velocidad: conducía su novia de entonces, que estaba en estado de embriaguez. Pero ahora ya lleva casi 20 años casado con la abogada australiana Mary Donaldson. "Hay que recordar que hace 20 años, en esa boda, fue la puesta de largo de Letizia, con un vestido rojo de Lorenzo Caprile", ha comentado Martín, que recuerda también que Felipe VI y el próximo rey de Dinamarca son primos y muy amigos.

Ampliar

A pesar de la relevancia de la noticia, la ceremonia en sí no tendrá ninguna pompa y circunstancia: se limitan a nombrarle después de un consejo de ministros. "La primera Constitución danesa, de 1954, puso fin a las ceremonias de coronación", explica Martín. "Lo que hay es una proclamación. Salen al balcón y se anuncia que es el nuevo rey, y poco más. Puede que se haga finalmente algún tipo de ceremonia, como se hizo en el caso de Holanda, pero como no hay tradición pueden ir inventándola sobre la marcha. Se está escribiendo la historia, no se está siguiendo un rito." Lo que ellos hagan sentará precedente, "porque no hay una abdicación en Dinamarca desde el año 1500."

Y por cerrar el capítulo royals: ¿por qué viene tanto a España la princesa Amalia de Holanda? ¿Puede ser por el clima? "Viene mucho a Madrid, donde playa no hay, y a Madrid Río no viene. La prensa holandesa habla mucho de su amistad con Boris de Bulgaria, hijo de Kardam y de Miriam Ungría. Es nieto del antiguo rey de Bulgaria, se llama Boris Sajonia-Coburgo-Gotha". Una boda entre la futura reina de Holanda y este chico que, aunque sea heredero de la corona búlgara es español, sería "una boda real-real".

St. Moritz o Gstaad

Martín Bianchi también le ha explicado a Sastre dónde pasan la navidad los ricos de verdad. Si son de nieve, se dividen entre St. Moritz y Gstaad. La primera es la estación de esquí preferida de las casas reales: ahí pasan Nochevieja la familia real griega o los Saboya. "Allí hay un club muy famoso, el Eagle, que es el club de esquí más antiguo de Europa. Pero si eres empresario muy rico, prefieres ir a Gstaad: ahí van los Botín, los Thyssen, los Cortina, o los Prado-Carvajal".

Entre estos dos destinos, Sastre elegiría St. Mortitz por una cuestión fonética, porque vete tú a pronunciar con naturalidad la palabra "Gstaad". Aunque en realidad, si fuéramos ricos-ricos, ricos de verdad, elegiríamos la playa, en cuyo caso deberíamos ir a St. Barthes, donde pasan la navidad Jeff Bezos, con su yate de 75 millones de dólares y 75 metros de eslora, o Mar Flores con su novio intermitente mexicano, Elias Sacal, o Ben Affleck y Jennifer López. A esta pareja se la ha fotografiado peleándose, como viene siendo habitual: Ben parecería estar molesto por tener que sacar fotos de Jennifer para su labor como influencer. Cuántas parejas entienden su hartazgo, ha empatizado Martín, a pesar de que él siempre suele ser "team Jennifer".

Martín deja además una noticia para el futuro: hoy se harán públicos los documentos relativos al caso Epstein, el multimillonario pederasta que se suicidó mientras esperaba condena en la cárcel de Nueva York. Allí hay más de 150 nombres, entre ellos los de Bill Clinton o Andrés de Inglaterra, que la prensa desmenuzará en las próximas semanas. Estaremos atentos.