La inflación termina 2023 bajando al 3,1% y se contiene el precio de los alimentos

Madrid

El Instituto Nacional de Estadística confirma que la inflación siguió bajando en el mes de diciembre. La tasa del IPC terminó el año en el 3,1%, una décima por debajo del dato del mes anterior, gracias a que el precio de la electricidad subió menos que hace un año y también porque el precio de los alimentos modera su encarecimiento. Con esta cifra el año termina con una inflación que está prácticamente a la mitad que cuando empezó el año, y por debajo de lo que preveían la mayoría de instituciones y organismos nacionales e internacionales.

Además, en el tramo final del año, el precio de los alimentos ha empezado a contenerse. Aunque siguen en niveles muy altos, la tasa de inflación de los alimentos marca en diciembre su nivel más bajo desde principios de 2022 y baja hasta el 7,3%. Esto ayuda a que también baje la inflación subyacente hasta el 3,8%, su menor tasa desde marzo de 2022.

La evolución del precio de los alimentos se debe al abaratamiento de las legumbres y hortalizas y a que los precios de la leche, huevos, queso, pan, cereales y carne subieron en diciembre de 2023 menos de lo que lo hicieron en igual mes de 2022. Por contra, el transporte elevó su tasa interanual casi cuatro puntos, hasta el 3,9%, como consecuencia de que el precio de los carburantes para vehículos personales no bajó tanto en diciembre de 2023 como en igual mes de 2022.

Con la moderación de su tasa interanual en diciembre hasta el 3,1%, la inflación encadena dos meses consecutivos de descensos y cae a su menor nivel desde el pasado mes de agosto, cuando se situó en el 2,6%.

El aceite de oliva sigue subiendo

Lo que de momento sigue sin contenerse es el precio del aceite de oliva que en diciembre ha vuelto a subir otro 0,5%. Es el producto de la cesta de la compra que más se ha encarecido en 2023, con una alza del 54% en su precio, más del doble que el segundo en la lista.

Lo que ha permitido que la inflación haya bajado más es especialmente la caída en los precios de la energía. De hecho, en el ranking de precios que más bajan en 2023 prácticamente todos son energéticos: el gas natural se ha abaratado un 20%, el butano, un 18,5% y la electricidad ha terminado el año un 17,3% más barata que en 2022.