Las fábricas de mascarillas españolas se reactivan: "Es necesaria nuestra supervivencia por la seguridad nacional"

Madrid

La ministra de Sanidad, Mónica García, ha establecido esta semana el uso obligatorio de mascarillas en los centros sanitarios de todo el país, a pesar de que la medida no contaba con el apoyo unánime de los consejeros del ramo de las Comunidades Autónomas. Una medida que obligará, de nuevo, a los españoles a acudir a la farmacia o el supermercado y adquirir otra vez paquetes de cubrebocas. La medida está causada por el incremento exponencial de casos de virus respiratorios en todo el territorio nacional.

Teóricamente, los primeros en notarlo deberían ser los fabricantes de mascarillas de nuestro país, por proximidad geográfica. Pero, aunque sí lo están notando levemente, se lamentan de que tanto el Gobierno central como las autonomías adquieren el material sanitario en los mercados asiáticos, descuidando así un sector "estratégico" para la seguridad nacional.

En plena pandemia, en España había 50 fábricas de EPIS. En verano quedaban 10. Ahora, 9. Con el pico de virus respiratorios y la obligatoriedad de las mascarillas en centros sanitarios, los fabricantes sí han notado un pequeño incremento de los pedidos. Tomás Martín, el presidente de la Asociación Española de Fabricantes de EPIS (OESP), asegura que "la cooperativas farmacéuticas y los clientes privados ya empiezan a realizar las primeras compras".

Hasta ahora, muchos fabricantes tenían las maquinas dos o tres horas en marcha a la semana por mantenimiento. No necesitaban producir más, porque tenían un stock importante de mascarillas, pero ahora están en marcha "a lo mejor algún día completo de la semana, pero tampoco toda la semana porque no sabemos qué va a pasar. Todos tenemos cantidades millonarias de stock. Pero esta fabricación es específica, porque te pide un color o un modelo exclusivo", dice Martín.

Unas horas que se traducen en mascarillas concretas: "una fábrica como la nuestra puede fabricar unas 200.000 en 8 horas y podíamos ir a 400.000 en 16 horas".

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Sin embargo, solo esta producción en momentos concretos no sostiene una industria. Ni el gobierno central ni los autonómicos compran el material sanitario que usan en España. Lo compran en Asia. Los fabricantes piden que se cree una reserva estratégica. "Todo lo que pedimos es que se nombre estratégica una cantidad de la compra de material sanitario. Que el 20% se quede en España, no se pide tampoco tanto", dice el presidente de la OESP. Sobre todo para que, en caso de otra pandemia, España tenga material suficiente para protegerse.