Un buque de propiedad estadounidense que transitaba por el golfo de Adén ha sido alcanzado este lunes por un misil, aparentemente sin que haya impedido que continúe su navegación, según ha informado la Marina británica. Los rebeldes hutíes de Yemen han reivindicado el ataque con misiles contra el portacontenedores norteamericano M/V Gibraltar Eagle, con bandera de las Islas Marshall, y afirmaron que la campaña de bombardeos de Estados Unidos y el Reino Unido contra sus posiciones tendrá «una respuesta inevitable». «Inevitablemente se producirá una respuesta a los ataques estadounidenses y británicos, y cualquier nuevo ataque no quedará sin respuesta ni castigo», ha señalado el portavoz militar de los insurgentes, Yahya Sarea, en una declaración televisada. Tras reivindicar el lanzamiento de «varios misiles» contra el portacontenedores de propiedad norteamericana, el vocero declaró como «objetivos hostiles» a «todos los barcos y buques de guerra estadounidenses y británicos» desplegados para hacer frente a los hutíes y para contrarrestar sus ataques en el mar Rojo. Horas más tarde, se ha registrado una nueva ronda de ataques aéreos cerca del aeropuerto de Al Hudeida, localidad portuaria del Yemen controlada por los rebeldes hutíes. Según los testigos, se ha escuchado una «gran explosión» cerca del aeropuerto de Al Hudeida, en la costa del mar Rojo, una de las principales localidades utilizadas por los hutíes para lanzar proyectiles contra embarcaciones comerciales que transitan por esta estratégica vía marítima. Operaciones de Comercio Marítimo de Reino Unido (UKMTO) ha indicado en su cuenta en la red social X que el «incidente» ha tenido lugar unas 95 millas náuticas al sureste de la ciudad yemení de Adén y ha agregado que «el capitán informa de que el lado de babor del buque ha sido alcanzado por un misil». «Las autoridades están investigando. Se recomienda a los buques que transiten con cautela y que informen a UKMTO (dependiente de la Marina Real británica) de cualquier actividad sospechosa», ha recalcado. Según la firma de seguridad británica Ambrey, se trata de un barco de bandera de islas Marshall pero de propiedad estadounidense. El proyectil habría causado un fuego en cubierta, si bien no existe constancia de heridos y, de hecho, la embarcación ha seguido navegando tras aumentar su velocidad. Una fuente de los hutíes ha dicho a la cadena que sus fuerzas navales «están listas para hacer frente a cualquier emergencia o amenaza a la seguridad de la navegación en la región», y ha acusado a Estados Unidos y al Reino Unido de provocar disrupciones en el mar Rojo con sus ataques contra el Yemen. El suceso tiene lugar tras los bombardeos ejecutados el viernes por Estados Unidos y Reino Unido contra Yemen, que se saldaron con cinco muertos, en el marco de la respuesta de ambos países a los ataques ejecutados por los rebeles hutíes contra buques en el mar Rojo. El grupo afirmó tras ello que «todos los intereses» de Estados Unidos y Reino Unido «se han convertido en objetivos legítimos», al tiempo que reiteró que continuará sus ataques contra buques israelíes o que vayan a puertos de Israel «para poner fin al cerco, detener la agresión y la guerra de exterminación contra Gaza y lograr la entrega de alimentos, medicinas y combustible (a la Franja)». Sobre estos ataques, el primer ministro británico, Rishi Sunak, ha defendido este lunes que los bombardeos fueron «limitados», «necesarios» y «proporcionados», y ha comunicado que 13 blancos de estas milicias fueron destruidos. Los hutíes, respaldados por Irán, controlan la capital de Yemen, Saná, y otras zonas del norte y el oeste del país desde 2015. El grupo ha respondido a la ofensiva israelí contra la Franja atacando embarcaciones con algún tipo de conexión con Israel --con más de 25 ataques hasta la fecha--, incluido el secuestro del buque «Galaxy Leader».