No sólo lluvias: la Aemet avisa de lo que llegará por el azote de las borrascas Hipólito e Irene
La borrasca Irene sucederá a Hipólito en una semana marcada por las lluvias generalizadas y las fuertes rachas de viento
Una mujer se protege de la lluvia y del viento. / Getty
Los últimos coletazos de la borrasca Hipólito, unidos a la llegada de un nuevo frente, bautizado como Irene por los servicios meteorológicos franceses, dejarán una semana marcada por la inestabilidad. Las precipitaciones volverán a ser la tónica dominante, con acumulados significativos en algunas zonas de la Península, si bien habrá otro fenómeno con el que habrá que tener precaución: las fuertes rachas de viento.
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"Este lunes estaremos bajo el paso de sucesivos frentes de la borrasca Hipólito y sometidos a vientos del suroeste en la Península del oeste de Baleares y sur de Canarias, que dejarán precipitaciones localmente persistentes en el oeste de Galicia y Sistema Central occidental", apunta el portavoz de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), Cayetano Torres.
Predominarán cielos nubosos o cubiertos y las precipitaciones se extenderán de oeste a este, de tal manera que afectarán a casi todo el territorio, a excepción del área mediterránea, donde se darán nubes medias y altas. Las precipitaciones serán más abundantes en el sur de Galicia, meseta norte, parte más septentrional de la meseta sur y Sistema Central, con probabilidad de que sean persistentes en la parte occidental del Sistema Central y el oeste de Galicia.
"Serán de carácter débil y ocasional en los tercios sur y este peninsulares y, en general, irán a menos en la segunda mitad del día, con posibilidad de nieve en Pirineos por encima de los 2000 metros", apunta Torres. En Canarias, predominará la nubosidad de tipo medio y alto, con probables precipitaciones al oeste del archipiélago. Por otra parte, es posible que se produzcan brumas y niebla en amplias zonas de la vertiente atlántica —en especial, en áreas de montaña—, así como bancos de niebla matinales en los Pirineos y depresiones del nordeste. También es probable que haya calima en Canarias y no se descarta que se dé en el sur peninsular.
Las temperaturas máximas descenderán en el tercio sureste peninsular, mientras que aumentarán en la mayor parte del cuadrante noroeste entorno del Ebro y Canarias, con mínimas en aumento de forma casi generalizada en la Península y Baleares. "El incremento de los valores será, incluso, localmente notable en valles", pronostica Torres. De esta manera, las heladas quedarán restringidas a Los Pirineos.
Se prevé viento intenso del oeste y suroeste en la Península y Baleares, con intervalos de fuerte en las islas y Alborán, rachas muy fuertes en zonas de la sierra del este y sudeste. En Canarias, soplarán vientos de componente sur, que llegarán también a rachas muy fuertes y arreciarán en las islas más occidentales.
Lo peor de la borrasca Irene llegará el miércoles
"Para mañana martes estaremos bajo la influencia de una nueva borrasca, Irene, que viene del suroeste, por lo que se prevé una abundante nubosidad con precipitaciones, afectando a la mayor parte de la Península", explica el experto. Las lluvias serán menos probables en el tercio este. Al final del día, se intensificarán y podrán ir acompañadas de tormenta en el extremo oeste peninsular y no se descarta que vengan en forma de nieve en los Pirineos. Habrá brumas y bancos de niebla matinales en buena parte de las zonas de montaña de la Península y en el nordeste, con posibilidad de que sean persistentes en el entorno de los sistemas Central, Ibérico y la Cordillera Cantábrica.
En Canarias, el paso de un nuevo frente dejará cielos nubosos o cubiertos con precipitaciones en las islas occidentales, que podrán ser fuertes y persistentes en La Palma y Tenerife, sin descartarse de forma ocasional en el resto. A lo largo del día Irán remitiendo y, en general, los cielos serán poco nubosos, exceptuando el noroeste del archipiélago, donde persistirá la probabilidad de precipitaciones. Se espera que haya calima en la mitad sur peninsular y el este de Canarias.
Las temperaturas máximas experimentarán un descenso en Canarias y en las zonas de interior, y no habrá grandes cambios en el resto. Las mínimas descenderán en buena parte de la mitad norte peninsular y medianías de Canarias, al tiempo que aumentarán en el este del archipiélago, Andalucía, centro y sureste peninsular. Las heladas quedaron restringidas a Los Pirineos y, de forma dispersa, a otras zonas de montaña.
Soplará viento de componente sureste en casi todo el país, con intervalos fuertes y muy fuertes en las islas de mayor relieve. En la Península, tenderán a arreciar, aunque se producirán, asimismo, rachas muy fuertes en el oeste de Galicia, golfo de Cádiz y montañas del norte.
Lo peor de la borrasca Irene llegará el miércoles, cuando se esperan precipitaciones en prácticamente toda la Península, a excepción del litoral mediterráneo y Baleares. También lloverá en el norte de las islas Canarias. En el resto del país podrían darse tormentas ocasiones. "Concretamente, en el oeste de Galicia y Sistema Central, así como en Andalucía occidental, podrían ser localmente fuertes y persistentes", sostiene Torres. La cota de nieve se situará entre los 1.800 y 2.200 metros en los Pirineos. La probabilidad de nevadas serán menor en el Sistema Central y la Cordillera Cantábrica.
Las temperaturas máximas aumentarán en el tercio nordeste peninsular y Melilla. En el resto del país, descenderán. Las mínimas aumentarán en Baleares, la mitad norte peninsular y Andalucía occidental, al tiempo que descenderán en el resto, donde pueden darse heladas débiles, sobre todo en zonas de montaña.
Soplará el viento intenso del sur y suroeste en casi todo el país, con poniente en el estrecho de Alborán. Se esperan rachas de viento muy fuertes en amplias zonas de la Península y Baleares, a excepción de las áreas no pirenaicas del extremo nordeste, donde, en general, soplará viento flojo.
"El jueves continuarán las precipitaciones débiles, más intensas por el oeste de la Península, que se desplazarán a la mitad sur y Canarias el viernes. De cara al sábado, vuelve el tiempo estable en toda la Península y Baleares, a excepción del extremo sudeste peninsular, con descenso de las mínimas y ascenso de las máximas. También habrá tiempo más estable en Canarias, con precipitaciones débiles al norte de las islas y temperaturas con pocos cambios", resume Cayetano Torres.
