El hacinamiento en las salas de asilo de Barajas alcanza su máximo histórico
La lentitud en la tramitación de las peticiones de asilo que entran por al aeropuerto madrileño provoca un colapso con cerca de 350 personas, entre hombres, mujeres y niños, durmiendo en el suelo con colchonetas y con chinches. Entre diciembre y el 15 de enero se han tramitado 847 expedientes en Barajas
Madrid
Las condiciones de insalubridad en las salas de inadmitidos del aeropuerto de Barajas, especialmente en las salas 3 y 4, han alcanzado un punto crítico de hacinamiento. Se ha registrado un máximo histórico, un récord, cerca 350 personas, de ellas 60 mujeres y 20 niños, aguardan en esas salas del aeropuerto madrileño a la espera de la resolución de sus peticiones de protección internacional.
La situación comenzó en diciembre, pero ha ido a peor. El agua se ha comido la madera de las puertas de los baños, las chinches corren por el suelo, detrás de los cubos de basura repletos de restos de comida, rebosantes, donde las bolsas se amontonan. En esas salas hay literas, pero no llegan para todos, así que duermen en el suelo, en colchonetas hinchables, que durante el día tienen que apilar para poder sentarse en sillas para pasar el resto del día.
Según la denuncia que ha presentado el sindicato SUP ante el Defensor del Pueblo, la sala 2 provisional recientemente establecida en la Terminal 2, “carece de estándares básicos de habitabilidad e higiene. Esto incluye ventilación inadecuada, iluminación artificial durante todo el día, un solo baño para todas las mujeres y niños, y colchonetas inflables sin desinfección adecuada sin camas”. En esa sala en concreto, actualmente, se agolpan 86 personas, según las fuentes policiales consultadas por la SER.
El Ministerio del Interior ha dado orden de desinfectar a diario esas salas, “se hace y se seguirá realizando hasta que sea necesario”, señalan a la SER desde el equipo que dirige Fernando Grande-Marlaska. Además, se ha reforzado el servicio de limpieza con las mismas empresas que prestan servicio en las comisarías policiales, para prestar unas condiciones dignas.
En cuanto al hacinamiento, la Policía Nacional trasladó esta semana al Centro de Internamiento de Extranjeros (CIE) de Aluche a cuatro extranjeros inadmitidos, que se encuentran a la espera de ser expulsados. Si no se ha trasladado a más personas es porque es el juez de vigilancia el que decide esos traslados, "a través de un proceso lento, pero garantista", según las fuentes de Interior consultadas por la SER.
Repunte de solicitudes
Desde el mes de diciembre se ha detectado un aumento en las solicitudes de protección internacional, principalmente de países africanos como Kenia, Somalia y Marruecos. Según fuentes policiales, muchas de estas personas llegan a Kenia donde consiguen un pasaporte falso en el mercado negro, porque España no reclama a este país un visado de tránsito a estas personas, aunque según han confirmado la SER fuentes gubernamentales, ese situación cambiará a partir del próximo sábado, se les exigirá esa documentación igual que al resto de ciudadanos africanos.
La fiscalía recurre el traslado de 50 solicitantes de asilo
La Fiscalía Provincial de Madrid ha presentado un recurso de reforma contra decisión del juzgado de Instrucción Número 46 de Madrid de permitir el internamiento en el Centro de internamiento de extranjeros de Madrid de cincuenta solicitantes de asilo que han permanecido en las saladas hacinadas del puesto fronterizo del aeropuerto Adolfo Suárez-Madrid Barajas.
La fiscal "considera que la decisión no es conforme a derecho, vulnerando las normas de competencia y de procedimiento, y por ello solicita su nulidad" según el escrito de la fiscal, al que ha tenido acceso la Cadena SER.
En el texto se señala que el juzgado no es competente para tomar estas medidas, que no es posible, con carácter general, acordar el internamiento en el CIE de personas solicitantes de asilo, salvo casos extraordinarios de motivos de seguridad o salud pública, y que no se puede aplicar a este grupo de personas que buscan protección en España la legislación de extranjería, sino que debe respetarse la ley de asilo. Más de 350 personas continúan en la sala de inadmitidos de Barajas, una cifra sin precedentes.
Javier Bañuelos
Redactor Jefe en la Cadena SER responsable de la información sobre Interior y Defensa. Antes trabajé...