Israel asegura que "ha perdido la confianza" en Borrell y le acusa de "situarse en el lado palestino"

Desde el inicio de la guerra en la Franja de Gaza, Israel ha ido mostrando una mayor desconfianza hacia la comunidad internacional. Llegó a acusar a países como España de estar a favor de Hamás y critica de manera constante a todos los interlocutores que no defienden su firme postura, como ya hizo con el secretario general de la ONU, António Guterres.

Este martes la diana del país liderado por Netanyahu se ha centrado en Josep Borrell, alto representante para Política Exterior de la UE. Según han informado fuentes oficiales israelíes a El País, desde Tel Aviv consideran que "han perdido la confianza" en Borrell, hasta el punto de que "no lo considera un interlocutor equilibrado de la UE".

En este sentido, los representantes hebreos han acusado al político europeo de "situarse en el lado palestino". Esta reacción del Gobierno de Netanyahu no es casual. Pese a que reconocen sus discrepancias sobre sus discursos pasados, consideran que las declaraciones que realizó este lunes, tras el Consejo de Asuntos Exteriores de la Unión Europea, (en el que estaban presentes también las delegaciones de Israel y Palestina) fueron un paso más allá.

Por un lado, criticó a Israel por "no proponer una solución" al conflicto en Gaza, sugiriendo que de esta forma "es difícil que pueda participar en las conversaciones necesarias para construir la paz". Además, mostró su sorpresa y tiró de ironía para calificar lo que había hecho el ministro de Exteriores israelí, Israel Katz: "Nos ha puesto dos vídeos muy interesantes, uno de ellos sobre una isla artificial para servir de puerto y otro sobre una línea de ferrocarril que enlaza la India con Oriente Medio. Creo que el ministro podría haber aprovechado mejor el momento y su tiempo para preocuparse por la seguridad de su país y por el elevado número de muertos en Gaza".

El tema a debatir en la reunión de los representantes de exteriores de los Veintisiete y las delegaciones israelí y palestina era precisamente trazar un plan para llevar la paz a Gaza. Borrell presentó un plan de 12 puntos que fue apoyado por varios ministros en el que se marcan las bases para establecer el fin de las hostilidades en la región y que pasa por la creación del Estado Palestino, que controlaría la Autoridad Nacional Palestina, y el mantenimiento del estado israelí.

Este martes, antes de conocerse la reacción de Tel Aviv, el propio Borrell ha criticado nuevamente la posición de Israel, señalando que no puede tener "derecho a veto" sobre la creación del Estado Palestino, y emplazó a todas las partes a seguir "hablando y discutiendo". En este sentido, las fuentes citadas por El País apuntan a que "ha ido demasiado lejos y se ha situado en uno de los lados, el palestino y ya no representa la línea de la UE en el conflicto en Oriente Próximo".

Por último, concluyen que "Israel no considerará su plan de paz como fiable y seguirá trabajando para promover la colaboración con la UE a través de otros interlocutores".

Tras el comunicado, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha salido a mostrar su apoyo a Borrell en estos momentos. "Quiero trasladar el firme apoyo del Gobierno de España a la labor del Alto Representante de la Unión Europea. La solución de los dos Estados, Israel y Palestina, y una Conferencia de Paz para Oriente Medio son el marco de la UE para trabajar con las partes y con la comunidad internacional. Queremos paz y seguridad para palestinos, israelíes y todos los pueblos de Oriente Medio", ha remarcado el presidente.