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Unos turistas piden a un pianista que deje de grabar en vídeo cuando tocaba en una estación de Londres y acaba llegando la policía

Una de las turistas alega que trabaja para la televisión china y por ello no quiere que le vean

El músico Brendan Kavanagh (Dr. K) tocando en la estación St Pancras de Londres / Elisa Muñoz Barrero

Madrid

En sitios turísticos a veces es difícil esquivar las cámaras ajenas. No sería raro que estuviéramos de fondo en alguna foto que luzca en el salón de alguien a kilómetros de donde vivimos, simplemente, porque pasamos cerca cuando decidieron capturar la imagen. Con los vídeos pasa lo mismo. Muchos artistas deciden grabarse en directo mientras la vida sigue transcurriendo alrededor y los viandantes a veces no son ni conscientes de la cámara.

Unos turistas chinos que pasaban hace unos días por la estación St Pancras de Londres y sí se percataron de que un pianista que estaba tocando allí estaba grabando y le pidieron eliminar el vídeo. A partir de ahí se desencadena una larga discusión entre el músico, Brendan Kavanagh (que se hace llamar Dr. K) y los turistas que argumentaban que una de ellas trabajaba para la televisión china y no quería ser reconocida.

Dr. K se niega a dejar de filmar: "Estamos en Gran Bretaña, no en China", señala, e insiste en que puede continuar su transmisión en directo porque estaban en un lugar público "y Gran Bretaña es un país libre". El incidente pasa a más después porque, mientras habla con una de las turistas, otro comienza a gritarle al pianista: "¡No la toques! No tenéis la misma edad, por favor, no la toques" Dr. K da un paso atrás y trata de explicar que solo había tocado la bandera china que llevaba. Además le recrimina que le haya tratado con esa agresividad.

Mientras, el turista chino sigue repitiendo todo el rato "no la toques, no la toques, no la toques" y le pregunta al músico por su nombre pero éste le hace la misma pregunta a él. Ninguno de los dos contesta. "¿Por qué discriminas a un país diferente?", comienza entonces a preguntar el turista de forma insistente. Vuelve a insistir en que le ha tocado las manos a su amiga y señala que su país tiene "una política de género diferente".

Al poco tiempo llega la policía y les separa. Se lleva al grupo de turistas chinos a un lado y tratan de hablar también con el pianista pero también le piden que no grabe, pero el músico hace caso omiso. "Estamos en un país libre", argumenta, y acaba publicando toda la conversación en YouTube.

Finalmente, el músico se sienta de nuevo frente al piano y comienza a tocar junto a un señor que ha estado como espectador durante toda la discusión. Dr. K sigue tocando y cuando la cámara cambia de plano se ve cómo al fondo siguen los turistas chinos hablando con la policía. El vídeo acaba con un boogie-woogie al piano y un joven con media botella de vino bebida acercándose a tocar con él.

El pianista sigue hablando de lo ocurrido en sus redes sociales y este lunes por la noche pasó por el programa de Mike Graham en televisión donde defendió que los turistas chinos habían tenido una actitud "ridícula". Considera que el incidente fue "una comedia de errores" que "plantea muchos problemas serios sobre reglas estúpidas, autoritarismo y también sobre la propia cultura británica", como recoge el Daily Mail.