El 'Monstruo de Amstetten' será trasladado de prisión, pero no quedará en libertad de momento

Austria lleva días pendiente de cuál va a ser el futuro de Josef Fritzl, el "Monstruo de Amstetten", el hombre que mantuvo secuestrada a su hija durante más de dos décadas en un sótano y a quien violó en esos años dando lugar al nacimiento de varios niños. La defensa de Fritzl, que tiene ahora 88 años de edad, había presentado una petición para su puesta en libertad por los problemas de salud mental, sufre demencia, y también de movilidad que tiene el autor de uno de los crímenes que más repercusión ha tenido en Europa en los últimos años.

Finalmente, este jueves el tribunal que debía tomar una decisión sobre Fritzl ha determinado que abandone la prisión en la que estaba, que es un centro de reclusión para personas con enfermedades mentales, y sea trasladado a una cárcel ordinaria. Una decisión que ha venido acompañada del revuelo de ver a Fritzl por primera vez en público desde su ingreso en prisión hace 15 años, cuando fue condenado a cadena perpetua.

La defensa de Fritzl aseguraba que en la cárcel en la que se encontraba no recibía la atención adecuada y el tribunal ha avalado que el condenado ya no representa un peligro para nadie. Ahora bien, no da luz verde a su puesta en libertad y condiciona esa decisión en el futuro a que Fritzl siga recibiendo terapia psiquiátrica.

El último informe médico sobre la salud mental de Fritzl ha sido la prueba definitiva para este paso intermedio hacia una posible puesta en libertad. Esa evaluación avala que el condenado ya no es una persona peligrosa. Mientras la defensa de Fritzl habla de un "éxito parcial" con esta decisión judicial, la Fiscalía cuenta ahora con 14 días para recurrirla.