E la nave no va

Madrid

La Legislatura encalla un poco más después de la votación de hoy sobre la ley de amnistía. Los patriotas de Ferraz, que se han manifestado en los últimos meses con estridencia para detenerla, se han encontrado sorpresivamente con un nuevo héroe impensado por ellos, Junts. El transcurso de lo sucedido evoca una de las últimas películas de Fellini, la decadente 'E la nave va'. Recuerden, un barco que navega para enterrar a una cantante de ópera ha de detener su singladura porque debe detenerse con el objetivo de salvar a un grupo de refugiados serbios que han huido de la guerra y que se encuentran perdidos en el mar. Ello cambia todo el guion. La sesión tuvo otra característica principal: emergió con nombre y apellidos en el Parlamento el elefante que llevaba tiempo barritando. Algunos jueces que tienen la querencia de pronunciarse siempre en la misma dirección y en el momento oportuno, que ejercen una gran influencia debido a su capacidad de presión para determinar la agenda pública y que por ello se han convertido en el poder fáctico por excelencia. Tenía razón la vicepresidenta del Gobierno, Teresa Ribera, aunque cuando lo dijo le cayeron chuzos de punta. Ahora se trata de observar cuál es la guerra de movimientos del Gobierno. Pues la de la oposición es casi seguro que no se torcerá. ¿Y Junts?