La esperada reunión esta tarde en Bruselas de PP y PSOE con la mediación del comisario de Justicia, Didier Reynders, para la renovación del CGPJ ha finalizado con el compromiso de un nuevo encuentro, que se celebrará el 12 de febrero. El ministro de Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes, Félix Bolaños, ha afirmado a la salida que es imprescindible alcanzar un acuerdo «porque la justicia no aguanta más tiempo de bloqueo». «Esta vez tiene que ser la definitiva», ha dicho. El encuentro, que comenzó a las 15:00, se ha prolongado durante casi dos horas. Ha definido como “cordial” y “constructiva” la reunión. Ha señalado que el Ejecutivo y los populares se ponían “manos a la obra” y que desde La Moncloa había la “máxima disposición” para recuperar la “normalidad” del órgano de gobierno de los jueces, que lleva en funciones desde diciembre de 2018. Hasta el 12 de febrero, ambas partes seguirán “trabajando”, al tiempo que destacó que el Gobierno considera que este nuevo intento de acuerdo “tiene que ser definitivo, porque la Justicia no aguanta más bloqueo”. Respecto a los “métodos de trabajo” que se seguirán para intentar llegar a un punto de encuentro, el ministro dijo que serían “discretos” y que darían a conocer lo pactado una vez hubiese entendimiento. «Confío en que todos estemos a la altura», ha confiado. «Soy muy pesimista, pero no voy a negar una posibilidad. Vamos a hablar de todo abiertamente para recuperar el prestigio de la Justicia. Van a ser conversaciones amplias y extensas», ha dicho González Pons. «No soy optimista, pero estoy satisfecho porque se han complido las expectativas», ha asegurado Pons, que además ha adelantado que se han hablado de más aspectos. “Se ha hablado de muchas cosas y en la medida en la que quiero garantizar el buen fin de las conversaciones, voy a procurar no ser indiscreto dándoles la máxima información y palabras suficientes como para que sepan interpretarme”, ha dicho. El PP se ha mostrado satisfecho tras la primera reunión. «Se van a discutir todos los asuntos del CGPJ tal y como veníamos reclamando. Es el planteamiento que siempre defendió la Comisión Europea y que defiende el Partido Popular. La Justicia española necesita políticos que defiendan a los jueces y no que los controle», afirman fuente del partido. El comisario europeo de Justicia, Didier Reynders, destacó este miércoles el «compromiso de las partes para trabajar juntos con la reforma del Consejo General del Poder Judicial», después de la primera reunión mantenida hoy con el ministro de Presidencia y Justicia, Félix Bolaños, y el vicesecretario de Acción Institucional del PP, Esteban González Pons. «En esta reunión, hubo un claro compromiso de todas las partes de trabajar juntos para garantizar la implementación de la recomendación de la Comisión», indicó Reynders en una declaración a través de su cuenta en X. Anunció que en el encuentro se acordó mantener una nueva reunión el próximo 12 de febrero «para hacer un balance de las discusiones». El modo en que ordenar este proceso es ya uno de los principales escollos que alejan a PP y PSOE porque los populares reclaman que las dos fases vayan de la mano para que se cumpla de manera simultánea la renovación del CGPJ y el cambio del sistema, mientras que los socialistas se aferran a que lo «urgente» es desbloquear los nuevos nombramientos y «más adelante» discutir sobre la segunda etapa. «Una vez que hayamos renovado el Consejo General de Poder Judicial, que es lo urgente y lo imprescindible para que la justicia funcione, pues a partir de ahí por supuesto que podemos hablar de otros asuntos», dijo Bolaños el pasado viernes desde Bruselas, tras recibir la convocatoria de Reynders. Ya en diciembre, el comisario apostó por empezar por la renovación porque, según dijo, por su experiencia los procesos de reforma son más largos, pero dejó claro que si las partes planteaban de manera consensuada una alternativa que compaginara los ritmos de la renovación y de la reforma la examinaría igualmente. La reunión se produce un día después de que la proposición de la ley de amnistía no haya logrado los apoyos suficientes para su adopción en el Congreso de los Diputados -por los votos en contra de Junts- y deba ser remitida de nuevo a la comisión de Justicia para reabrir la negociación del texto. Fuentes del PP han avanzado que el vicesecretario Institucional llevará también esta ley a la reunión en Bruselas. Tras el debate y votación, el Grupo Popular ha considerado que Bolaños queda «inhabilitado» como ministro por «callar» en el pleno mientras «se insulta a los jueces» desde la bancada de los independentistas. Los populares consideran que ese encuentro en Bruselas con el comisario de Justicia «va del Estado de Derecho» y eso «incluye la amnistía y el terrorismo», han indicado las mismas fuentes, que han garantizado que «la amnistía estará en la reunión». El portavoz del Grupo Popular en el Congreso, Miguel Tellado, ya aseguró este martes que es «obligación» del PP «trasladar a Europa toda la información necesaria para que la Comisión Europea pueda actuar dentro del margen de sus competencias». Desde el registro de la proposición de ley en el Congreso, Reynders se ha mantenido en la prudencia alegando que no concluirá su análisis del alcance de la norma hasta que ésta haya concluido su tramitación parlamentaria y adopte por tanto su posición definitiva, aunque ha subrayado que sigue con mucha atención la situación y examinará en detalle si es compatible con el Derecho comunitario. El comisario solicitó información detallada sobre la propuesta al Gobierno alegando que había recibido muchas muestras de «preocupación» por parte de asociaciones de jueces, políticos y de la sociedad civil, pero ha evitado dar una opinión propia hasta que el proceso acabe y los servicios jurídicos de la Comisión terminen su análisis.