Albares aplaza su viaje a Argelia por "motivos de agenda argelina" y Exteriores confirma que "no hay prisa por retomarlo", pero las relaciones están bien

Madrid

El ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, ha aplazado su viaje a Argelia previsto para este lunes “por motivos de agenda argelina”, según ha informado en un mensaje el Ministerio de Exteriores a los periodistas que tenían previsto viajar con él al país africano.

El viaje, por invitación del ministro de Exteriores argelino, Ahmed Attaf, tenía como objetivo reanudar las relaciones políticas y diplomáticas entre España y Argelia tras casi dos años de crisis. Fuentes diplomáticas han asegurado que se trata de un mero aplazamiento y que no hay prisa por retomar el viaje, pero que las relaciones entre ambos países están bien.

Crisis de 2022

La ruptura de relaciones entre España y Argelia se produjo en marzo de 2022, nada más conocerse la decisión del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, de apoyar las tesis autonomistas de Marruecos sobre el Sáhara Occidental.

El cambio de posición española provocó la indignación de Argelia, quien retiró a su embajador en España y rompió el Acuerdo de Buena Vecindad entre ambos países, cortando toda relación política y los intercambios comerciales, salvo por la venta de gas natural.

La posición de Argelia comenzó a variar a mediados de noviembre cuando, uso días antes de la investidura de Sánchez, nombró a un nuevo embajador en España. Desde entonces, se han recuperado los enlaces aéreos entre ambos países y se ha autorizado la reanudación del comercio en ciertos sectores como el avícola y el cárnico.

Albares condena las operaciones militares en Rafá y reclama a Israel un "alto el fuego" inmediato

El ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, Jose Manuel Albares, ha condenado a través de la red social X (ante Twitter) la posible misión militar que va a ejecutar Israel sobre la ciudad de Rafá, en el sur de la Franja de Gaza.

El primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, anunció este viernes que había dado orden al Ejército y al Ministerio de Defensa el comienzo de los preparativos para una posible entrada allí con el objetivo de eliminar a los cuatro batallones del movimiento islamista palestino Hamás que, según sus informes de Inteligencia, operan en la zona.

Según Albares, extender las operaciones militares supondrían "una grave amenaza para la vida de más de un millón de refugiados palestinos en la zona y aumentaría la catástrofe humanitaria".

La misión israelí pondría en peligro las vidas del millón aproximado de desplazados forzados palestinos que han escapado a la localidad por los bombardeos israelíes en el marco de la guerra contra Hamás.

Por ello, el ministro de Asuntos Exteriores ha reclamado a través de su mensaje en la red social un "alto al fuego, la liberación de rehenes, el respeto a derecho Internacional Humanitario y la entrada de ayuda".

Biden pide a Netanyahu abstenerse de un ataque a Rafá, pero Israel no cambia su posición

El presidente de EE.UU., Joe Biden, ha pedido este domingo al primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, abstenerse de una ofensiva militar en la localidad de Rafá, en el extremo sur de la Franja de Gaza, sin un plan que garantice la seguridad de civiles. El primer ministro de Israel, por su parte, ha asegurado este domingo que Israel está decidido a realizar la ofensiva terrestre pese a la presión internacional.

Quiénes dicen que bajo ninguna circunstancia debemos entrar a Rafá básicamente están diciendo que perdamos la guerra" ante Hamás, declaró Netanyahu en una entrevista al canal ABC News, en un momento en que las tropas israelíes van combatiendo en la zona de Jan Yunis y se teme que avancen por tierra hasta Rafah, fronteriza con Egipto y donde hasta ahora se refugia gran parte de población de toda Gaza.

Las advertencias ante la operación de Israel en el extremo meridional de Gaza se hacen sentir desde la ONU, que alertó de una posible masacre de civiles y violaciones de la ley internacional en caso de llevarse adelante.

EEUU también ha expresado su preocupación. Este domingo Joe Biden habló sobre ello con Netanyahu en una llamada de 45 minutos en que le aseguró que una operación en Rafá no debería hacerse sin un plan "creíble y ejecutable". El primer ministro israelí ordenó hace dos días al Ejército que proponga un posible plan de evacuación para los civiles de Rafá, donde se hacinan 1,4 millones de palestinos, la mayoría desplazados internos, atrapados y sin salida.

A su vez, Egipto pidió este domingo que se unan "todos los esfuerzos internacionales y regionales" para evitar una ofensiva. Esta le afectaría mucho, ya que tiene una frontera de 14 kilómetros de largo con Gaza que colinda en Rafá, llamada "Línea Filadelfia"

Un fuerte ataque de Israel sobre Rafá -el único punto de Gaza que no ha tomado por tierra- podría causar más tensión e inestabilidad en la península egipcia del Sinaí. El Cairo teme un éxodo masivo de civiles palestinos hacia su territorio, algo que por ahora no pasó porque solo está permitiendo su paso a cuentagotas.