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La mitad de los hombres decide fraccionar el permiso de paternidad para cuidar al bebé cuando acaba el de la madre

La cifra de permisos fraccionados se ha disparado desde que el permiso se declaró intransferible y ha pasado del 20% en 2019 al 50% en 2021.

Los juristas coinciden en que la sentencia del Supremo también afecta a las prestaciones por paternidad.(Getty Images)

Los juristas coinciden en que la sentencia del Supremo también afecta a las prestaciones por paternidad.

Madrid

La extensión del permiso de paternidad hasta igualarlo al de maternidad ha sido un éxito si atendemos a los datos publicados por el Centro de Políticas Económicas de Esade (EsadeECPol) que lleva por título ¿Qué sabemos sobre el uso de los permisos de paternidad en España? Los hombres están disfrutando de su derecho al máximo, prácticamente el 100% agota las 16 semanas como ya reflejaban los datos de la Seguridad social, ahora también sabemos que cada vez se implican más en la crianza. Un 50% de los hombres decidió fraccionar su permiso en 2021 frente a sólo el 20% que lo hizo en 2019. El cambio se ha visto favorecido por la decisión de hacer los permisos intransferible en 2018. La inmensa mayoría de los hombres que fracciona su permiso- un 75%- comparte, de media, las 12 primeras semanas con la madre y guarda cuatro para después de que ella vuelva al trabajo.

Una tendencia creciente

Las autoras de este estudio creen que esa tendencia a repartir el tiempo de cuidado irá a más en número de hombres y en tiempo teniendo en cuenta lo que ha aumentado en en tan poco tiempo: "Yo creo que lo que estamos viendo claramente es una tendencia creciente de ese uso fraccionalizado que nosotros interpretamos también en parte como aprendizaje porque esto no estaba disponible no era una opción y hemos visto un crecimiento de esa opción muy, muy rápida", explica Claudia Hupkau es profesora en CUNEF universidad y una de las autoras. "Estamos convencidos de que aumentará en los próximos años y cada vez más padres cogeran su permiso cuando ya han vuelto las madres a su empleo con lo cual aumentará el tiempo que el menor está cuidado por uno de sus progenitores en casa". Fraccionar el permiso supone, recuerda esta investigadora, más implicación de los hombres en los cuidados de los hijos, en las tareas del hogar y repercute también en el bienestar de los bebes. "Usando datos para España y varios países, respectivamente, observan que los niños nacidos después de distintas reformas que aumentaron los permisos parentales reservados para los hombres muestran actitudes más igualitarias en materia de género y tienen normas sociales menos estereotipadas. También es más probable que adopten comportamientos cotidianos contrarios a los estereotipos de género y elijan carreras tradicionalmente femeninas, como la educación o la sanidad", se señala en el estudio.

Los datos analizados por EsadeEcPol también revelan que hay empleos en los que el permiso se fracciona menos: sobre todo hostelería o construcción, aunque la diferencia es de alrededor de una semana, y que las comunidades en los que estos sectores tiene más peso como Andalucía, Extremadura o canarias tienen porcentajes más bajos de permisos fraccionados. Las investigadoras destacan en sus conclusiones que los cambios que estamos viendo respecto al disfrute y la fracción de los permisos se acabará notando en el mercado laboral: "también se esperaría que la equiparación del permiso de paternidad con el de maternidad provoque cambios en las expectativas de las empresas sobre las diferencias entre padres y madres en términos de la duración de los permisos, la reducción de la jornada laboral o incluso el abandono del empleo después de dar a luz. Esto podría reducir la penalización de las madres en el mercado laboral (child penalty), reduciendo así la brecha de género asociada a la llegada de los hijos".

 
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