¿Ser mujer y viajar sola? Clara ha recorrido medio mundo en bici y tiene un mensaje muy claro

Una mujer que ha recorrido medio mundo sola en bici ha lanzado un mensaje muy claro sobre lo que significa viajar sola por el mundo siendo mujer. Se llama Clara Dezcállar y ha compartido su experiencia en el programa SER Aventureros de la SER.

Dezcállar, que acaba de llegar a Barcelona tras recorrer en bici la zona del Atlas en Marruecos y toda la península Ibérica tras cruzar el estrecho de Gibraltar, ha explicado que durante sus viajes tiene siempre "le radar activado". "¿Es un radar por los riesgos de la exigencia física o también por el peligro personal que supone ser mujer viajando sola?", le han preguntado en el programa.

"Es evidente", ha contestado ella, contundente. "Sería una utopía deciros que no pienso en ese riesgo durante mis viajes y que no pienso con ese filtro cuando preparo uno de mis viajes". Dezcállar ha contado su historia en la SER pocos días después de que se conociese la noticia de que una turista española, que recorría el país en moto junto a su marido, fue violada por varios hombres en India.

La protagonista de SER Aventureros ha explicado que, desgraciadamente, el hecho de ser mujer sigue siendo un factor importante a la hora de viajar en solitario, pero ha dejado claro, con su propia experiencia, que eso no debe ser un problema a la hora de afrontar aventuras. Su secreto es la preparación. "Cuando preparo un viaje, me planteo si voy a poder cruzar ese país, cómo están sus fronteras, cómo está desde el punto de vista de conflictos... y también cómo me voy a encontrar yo y si voy a ser capaz de hacer frente sola al reto físico".

"Por eso, cuando digo radar, se trata de un radar 360 que tiene que ver con lo físico, con lo emocional, con la seguridad, con lo burocrático y con lo meteorológico", ha explicado.

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Miles de kilómetros en bici

Su última aventura, la de Marruecos, ha sido dura. Clara ha explicado que es "una zona en la que las montañas están entre los 2000 y los 4000 metros" y ha reconocido que tuvo que cambiar varias veces de planes debido a la dificultad imposible de su itinerario inicial.

"Tuve que reformular ruta porque había pensado en una ruta muy exigente, muy ilusa, sin pensar que iba cargada y al llegar y ver la verticalidad de las ascensiones, vi que tal vez no era capaz de hacerlas", ha contado. "Pensé 'antes de que te metas en el profundo Atlas, porque ahí ya no va a llegar ni bus ni nada habrá que rehacer' y volví a Marrakech para replantear ruta y hacer un poco más rodadora".

En su relato, Dezcállar ha dado mucha importancia a la dificultad física, pero también ha puesto de relieve la importancia de saber gestionar las emociones. "Si me preguntas qué es de lo que más orgullosa estoy, te diría que es de la gestión emocional constante". "Durante siete meses, es una toma de decisiones constante y acabas agotada, en el sentido de que había días que no podía más, me decía a mí misma 'no quiero pensar, no quiero pensar'".

Es por eso que ahora necesita procesar lo vivido y descansar, aunque su cabeza esté ya dando forma a nuevas aventuras: "Es verdad que al llegar a casa, reposar un poco y bajar las pulsaciones, me he dado cuenta de que esto me hacía falta ya. Es verdad que desde el punto de vista primermundista que tenemos, yo esto lo hago por disfrutar y he vuelto a mi zona de confort, pero me he quedado con ganas de más y ya hay varias ideas rondando por mi cabeza".