De medirse al Barça en Champions a dejarlo todo por la fontanería: la insólita decisión de Crummer

Los 90 minutos de Matilda Larissa Brummer defendiendo la camiseta del Brann ante el FC Barcelona iban a ser los últimos, aunque el gran público no fue consciente de ello hasta instantes después de concluir la eliminatoria de cuartos de la Champions League. La australiana acudió a las habituales entrevistas post-partidos con el periódico noruego Bergens Tidende, que en ese momento estaba transmitiendo su podcast Ballspark en directo, cuando soltó un bombazo del todo inesperado. El del Johan Cruyff fue el partido de su despedida del fútbol, con sólo 28 años, y aseguró que su decisión se debía a su deseo de formar una familia en su país natal y dedicarse a la fontanería.

"Es mi último partido, he decidido retirarme", transmitió la futbolista al término del partido de Champions, sorprendiendo a unos periodistas que sólo aguardaban su despedida del Brann. "Fue un final bastante emotivo. Cuando estaba agradeciendo a los aficionados, se puso muy emotivo. Estoy feliz de terminar aquí en un partido de cuartos de final de la Liga de Campeones", amplió en esta charla la internacional con Australia en 33 ocasiones, que incluso estuvo en la prelista para disputar el Mundial 2023. La noticia, por tanto, se ha asumido con máxima sorpresa en el país oceánico, tanto por los tiempos como por las razones. El Brann, de hecho, apenas acumulaba dos semanas de competición este año, y este giro drástico se ha debido a que ya la próxima semana comenzará su nuevo trabajo como fontanera, como detallan en el medio australiano Optus Sport.

Crummer, en sus declaraciones, se encargó de explicar que "no fue una decisión fácil": "Le he dedicado 28 años al fútbol, así que es hora de cambiarlo, ser una buena madre y estar ahí para la familia de una vez". "Me han puesto en primer lugar durante tanto tiempo, ahora creo que es hora de que finalmente yo los ponga a ellos en primer lugar. Con los dos pequeños, siendo tan pequeños como son, me estoy perdiendo mucho. No puedo esperar a estar en casa y finalmente volver a ser parte de la familia. Estoy en casa por Semana Santa y es algo que no he celebrado con mi familia, no creo, nunca. He estado fuera, así que es algo de lo que tengo muchas ganas", amplió, antes de coger el vuelo ya hacia Australia en la noche del jueves.

Despedida ante el Barça

No pudo asaltar el equipo noruego el estadio Johan Cruyff en el último partido de Matilda Larissa Crummer. El Brann, una de las sensaciones de la presente Champions, dejó buenas sensaciones en el partido de ida en Noruega pese a caer por la mínima (1-2) frente a un Barça que finiquitó su clasificación a semifinales en la vuelta (3-1). Larissa, aunque no pudo despedirse con gol, completó la totalidad de los minutos como referente ofensivo en una cita que quedará en su recuerdo sin duda alguna. Ya el próximo "miércoles", como anticipó la jugadora, le tocará ponerse el mono de fontanera.