La Guardia Civil visita a Cheikh Sarr tras el incidente racista en el Sestao-Rayo Majadahonda

Cheikh Sarr, portero que sufrió insultos racistas en el partido que enfrentó al Rayo Majadahonda en el campo del Sestao, no ha entrenado este lunes con el resto de sus compañeros pese a que sí se ha ejercitado en el gimnasio de las instalaciones deportivas del club madrileño. Un entrenamiento al que han acudido una pareja de la Guardia Civil para preocuparse por la situación del guardameta senegalés. Posteriormente, el jugador ha salido con su coche por la puerta trasera del recinto y sin dar declaraciones a los medios de comunicación.

Los incidentes sucedieron este pasado sábado en el campo del Sestao durante un partido del grupo 1 de Primera Federación donde Cheikh Sarr, que fue expulsado por ello, se encaró con los aficionados que estaban detrás de su portería al recibir insultos racistas que luego denunció al árbitro. Tras estos insultos, sus compañeros decidieron abandonar el terreno de juego sin que se reanudase el partido, algo por lo que el presidente del club madrileño se mostró orgulloso "por crear un precedente" en una entrevista en 'Carrusel Canalla': "Si vuelve a pasar el domingo siguiente, lo haremos igual. Nosotros con ese tipo de comportamiento ni vamos ni jugamos".

Desde el club se explicó esta acción en un comunicado oficial: "Ante los lamentables hechos, donde Cheikh Sarr fue objeto de insultos racistas por parte de algunos asistentes, nuestro equipo tomó la decisión de no continuar con el partido. Esta decisión responde a nuestra firme postura de no tolerar actos de discriminación o racismo de ninguna índole". Posteriormente, el Sestao River publicó otro texto en el que "reitera su más absoluta condena contra el racismo y la violencia" tras los insultos racistas a Sarr.

Jorge Casado, capitán del Rayo Majadahonda, repasó en 'Carrusel Deportivo' todo lo ocurrido: "Y hay que morderse la lengua. Te estoy hablando yo, que no lo he sufrido directamente. Imagínate mi compañero. Le han llamado p*** negro de mierda, le han hecho el ruido del mono y le han llamado mono. Acabábamos de encajar del segundo gol, íbamos a sacar de centro y me ha parecido escuchar algo. He visto a Cheikh y ya sabía lo que era. Le conozco muy bien; si estaba ahí era por eso. Él ha sido el que lo ha escuchado. Los insultos de p**** españoles han sido durante todo el partido".