Bioética alerta de los peligros para los hijos de la cocrianza, un nuevo modelo de familia en la que los padres no tienen relación afectiva

El comité de Bioetica avisa del peligro de lo que llama la mercantilización de los niños. Se refiere a lo que se conoce como coparentalidad o cocrianza, dos padres o dos madres que tienen un hijo sin tener una relación afectiva o sexual. En un informe que acaba de publicar, este organismo consultivo advierte del riesgo de la  cosificación de los niños por las agencias que intervienen en el proceso. Son las que ponen en contacto a mujeres y hombres que quieren tener hijos y redactan los convenios con las pautas sobre la crianza. Bioética alerta de la mercantilización y cosificación del menor en el papel de las agencias intermediarias. Este nuevo modelo de familia consiste en tener un hijo sin ser pareja. Se conoce como coparentalidad o o crianza. En España de momento hay pocos casos. Existen al menos hasta cinco agencias que se dedican al 'tinder para tener hijos'.

El organismo consultivo ve riesgos de mercantilización y cosificación del menor por el papel de esas agencias que intervienen en el proceso. Son las que ponen en contacto a mujeres y hombres que quieren tener hijos sin que haya entre ellos ninguna relación afectivo sexual. No convertir al hijo en un “bien de consumo” o mercancía y no “instrumentalizarlo” para satisfacer el anhelo de ser padres. Es la principal recomendación del comité que cree necesario establecer marcos éticos y legales sólidos que definan los derechos, deberes y responsabilidades parentales y garanticen el bienestar y el interés superior del menor.

Es un nuevo modelo de familia emergente en países como Estados Unidos, Francia, Reino Unido o Canadá. En España es todavía muy poco frecuente pero se está abriendo camino a través de estas agencias intermediarias que cobran por sus servicios. Además de poner en contacto a mujeres y hombres que quieren tener hijos sin tener relación de pareja, estas empresas supervisan el acuerdo de coparentalidad. Esto es lo que preocupa a los expertos.

Ese plan incluye desde la selección de la clínica de fertilidad hasta la gestión de toda la crianza del menor: la organización de sus primeros días y meses del bebé, el orden de los apellidos, las bajas por maternidad y paternidad, el lugar del domicilio, la custodia compartida, los gastos de cuidados, las vacaciones, el turno de visitas e incluso los gastos universitarios en un futuro.

Riesgo de cosificar al hijo

El comité ve en los acuerdos de coparentalidad un riesgo de “cosificar” al menor ante una previsión anticipada de su vida que puede llevar a una “excesiva predeterminación de su personalidad” que indicaría más bien un diseño adaptado a los deseos de sus progenitores”. Por eso, cree necesaria una flexibilidad en esos acuerdos y no tanto la exhaustividad.

En su informe, aprobado por unanimidad, los trece expertos del comité alertan de que esta fórmula afecta también a los principios de igualdad y justicia porque no todas las personas pueden pagar un contrato de estas características con las agencias.

Algunas de estas empresas hablan de que han puesto en contacto a 30 progenitores para este fin y que ya han nacido bebés.