Reportajes
Ciencia y tecnología | Actualidad

¿Cómo funciona el cerebro de las mujeres?

El embarazo, el postparto o la menopausia condicionan el funcionamiento del cerebro de la mujer y determinan sus reacciones, sus comportamientos o incluso su predisposición a determinadas enfermedades

Reportaje EP121 | Nos metemos en el cerebro de una mujer

Del cerebro de las mujeres se sabe muy poco y este dato lo confirma: de los 50.000 estudios que se han publicado de neuroimagen y del funcionamiento del cerebro en los últimos años, solo el 0,5% se centra en factores que afectan exclusivamente a las mujeres (el embarazo, el parto, el postparto o la menopausia).

En la infancia, los hombres y las mujeres experimentan una sobreproducción de conexiones cerebrales, es decir, aumenta muchísimo la materia gris, pero luego en la pubertad empieza a disminuir y esto se debe al proceso congnitivo. Nuestro cerebro va aprendiendo y madurando funciones. Así empieza a explicar cómo funciona este órgano la doctora del Hospital General Universitario Gregorio Marañón, Susana Carmona.

Pero este proceso de maduración cerebral, aunque se completa tanto en hombres como en mujeres, no es igual para los dos. Eso que siempre se ha dicho que las mujeres maduran antes que los hombres, en cierta medida es así.

"La maduración cerebral suele ocurrir antes en niñas que en niños", explica la doctora Carmona. Nuestro cerebro es más vulnerable a patologías mentales durante la adolescencia, pero las mujeres son más propensas a sufrir unas y los hombres otras. "Las mujeres tendemos más a patologías como la ansiedad o la depresión, mientras que en niños se observa un incremento de los trastornos de conducta o el control de impulsos", ampliaba la doctora. La clave para marcar esta diferencia, al menos según lo que sabemos hasta ahora, está en la carga hormonal y en el tipo de hormona que estimula el cerebro.

Funcionalmente no sabemos todavía si hay diferencias entre el cerebro de un hombre y el de una mujer, pero anatómicamente sí sabemos que el de ellas es más grande. Pero, ¿qué cambia con el embarazo? La respuesta: mucho.

Embarazo

Durante el embarazo el cerebro de la mujer pierde materia gris, pero esa parte del puzzle no se queda incompleta. Se ha observado como, en paralelo, se potencia su capacidad de cuidado y su vínculo con el bebé. Es decir, el cerebro ha tenido que reorganizarse para hacer espacio para esta otra función que adquiere la mujer. Explica la doctora Carmona que durante el embarazo "se crea un nuevo órgano endocrino, la placenta, que libera hormonas al torrente sanguíneo y le va diciendo a los diferentes órganos del cuerpo de la mujer cómo deben funcionar para optimizar todo el proceso de gestación, parto y postparto". Además, "sabemos que las hormonas de la gestación son capaces de entrar al cerebro, modificar su función y su anatomía, y que esos cambios cerebrales facilitan la conducta maternal".

Hasta hace muy poco se pensaba que estos cambios cerebrales eran los mismos desde la gestación hasta el postparto. Pero no es así. El postparto es otro momento traumático que vive el cuerpo y que también supone cambios cerebrales. Esto determina ciertos comportamientos de las mujeres durante esa época.

Es igual de importante cuidarse durante en el embarazo como en el postparto

Es igual de importante cuidarse durante en el embarazo como en el postparto

Postparto

La pérdida de material gris en el cerebro de la mujer "parece asentuarse en el momento del parto", pero esta pérdida se revierte ligeramente durante el postparto. Pero hay otro factor que determina cómo funciona el cerebro de una mujer y, en este caso, no sólo de la mujer. La interración con el bebé provoca también cambios cerebrales. Esto pasa en los padres y en las madres adoptivas, aunque con "ligeras diferencias en cuanto a magnitud, tiempo y forma", subraya la doctora Carmona. Además, conocer al detalle qué cambia en el cerebro de la mujer durante el parto ayuda a prevenir o a diagnosticar a tiempo la depresión postparto.

"Hasta ahora los estudios sobre las bases cerebrales de la depresión postparto se centraban en comparar a mujeres con depresión postparto, con mujeres sin depresión postparto", comenta la investigadora. "Nosotros ahora lo que estamos haciendo es crear una base de datos longitudinal, es decir, que sigue a las mismas mujeres durante toda la transición a la maternidad y que recogen, no solo variables cerebrales, sino también otros biomarcadores hormonales y variables neuropsicológicas, como por ejemplo la historia de depresión o el síndrome discólico premenstrual. También se estudian variables obstétricas y ginecológicas como la experiencia de parto o el estatus socioeconómico y el apoyo social, que también sabemos que pueden incidir en el riesgo de depresión", concluía.

Pero, ¿para qué va a servir todo esto? "El objetivo es crear un modelo que nos permita saber qué es lo normal, lo esperable durante la transición a la maternidad y a partir de ahí identificar las desviaciones que nos permitan predecir la aparición de trastornos mentales postparto para poder prevenirlas y tratarlas". Y, ¿qué pasa en el cerebro de las mujeres que no son madres? Para notar cambios hay que esperar hasta la menopausia, algo que también va a experimentar la que es madre. Aquí nos econtramos con un estigma y un tabú que se está empezando a romper.

Menopausia

"La mujer ha vivido toda su vida con determinados niveles de estrógenos, y al perderlos en la menopausia, el cerebro tiene que aprender a vivir sin ellos". Es decir, se tiene que readaptar. Los estudios sobre la menopausia son muy recientes, aunque su impacto en el cerebro y en la conducta de la mujer son relevantes. Comenta la doctora Carmona que durante esta etapa "se producen adaptaciones cerebrales en muchos niveles, desde cambios en el metabolismo cerebral hasta cambios en la conectividad o en la función o anatomía del cerebro". Los niveles de estrógenos lo cambian todo porque "estas hormonas tienen receptores en diferentes regiones cerebrales implicadas con la cognición y con la regulación emocional, por eso un porcentaje muy elevado de mujeres padecen síntomas durante la menopausia, no solo físicos como los sofocos o los trastornos de sueño, sino también síntomas cognitivos o síntomas emocionales".

Así que las hormonas femeninas marcan la diferencia y hacen que el cerebro de una mujer y el de un hombre no sean idénticos ni tengan, en algunos, casos, la misma respuesta a los estímulos. Aunque quedan muchas preguntas todavía en el aire ¿qué pasa con el cerebro de la mujeres si tiene varios embarazos y partos? ¿Son iguales todos los cambios? o ¿cuánto duran estas variaciones en el cerebro de las mujeres?

Episodio 121 | ¿Cómo funciona el cerebro de las mujeres?

Sigue el canal de la SER en WhatsApp
Encontrarás toda la información, el deporte y el entretenimiento: la actualidad del día y las noticias de última hora, los mejores vídeos y momentos de la radio, entrevistas, reportajes y mucho más.

Suscríbete ahora

Yilian Ayala

Cubre la información internacional desde la redacción...