Carlos Sainz no ha tenido un buen fin de semana en el GP de China de Fórmula 1. El piloto español, que venía de hacer varios podios, e incluso conseguir la victoria en Australia, no ha podido pasar de una discreta quinta plaza en un fin de semana complicado para la escudería Ferrari. Verstappen y Checo Pérez han ocupado la primera y tercera plaza, respectivamente, por la segunda de un Lando Norris que ha cuajado su mejor fin de semana desde que comenzó el curso en la Fórmula 1. Por ello, el piloto madrileño ha analizado la carrera disputada en China como «un poco loca». Para él, la clave ha estado en la mala salida de los coches de la escudería italiana, porque eso les ha costado dos posiciones a cada uno que ya ha sido muy difícil de remontar y en ningún momento han estado cerca de poder optar a subirse a uno de los cajones que te otorga terminar entre los tres primeros clasificados. «Luego hemos intentado seguir al Mercedes, hemos puesto la dura muy pronto y para el último stint he tenido que hacer un stint larguísimo», ha añadido Sainz. El Carlos más sincero ha sido muy claro cuando ha dicho que su quinto puesto en China ha sido «lo mejor que podían hacer», tal y como se han dado las circunstancias de la carrera: «Sinceramente, no hemos sido muy rápidos en este fin de semana. En carrera esperábamos ir mejor. Es el circuito que más nos ha costado hasta ahora». «Me he saltado una carrera y aún así estoy en los 5 primeros en todas las carreras», ha finalizado. Su compañero de escudería, Charles Leclerc, ha querido explicar que el principal problema de Ferrari en China ha estado relacionado con los neumáticos, puesto que en diversas ocasiones se salió fuera de la trazada por no tener un buen agarre: «Hemos tenido problemas con los neumáticos y me he ido a la hierba en muchas curvas y he oído ruidos en el coche». Por último, ha querido explicar que el trascurso de la carrera ha sido algo realmente raro para él y más en concreto con los neumáticos. «Hemos tenido muchos problemas con los duros», ha concluido.